La Universidad Católica de Valencia carga contra la selectividad a alumnos extranjeros que plantea el Gobierno
El rector de la UCV, José Manuel Pagán, se ha referido en el acto de apertura del curso al borrador del Real Decreto que ha presentado Universidades: «Expulsará a los alumnos extranjeros a otros sistemas universitarios europeos»
La Universidad Católica de Valencia (UCV) ha celebrado el Acto de Apertura del curso 2024-2025, que ha presidido el arzobispo Enrique Benavent, gran canciller de la UCV, en la sede Santa Úrsula. Junto al rector, José Manuel Pagán, y el resto de miembros de la comunidad universitaria, han participado en el acto representantes de todas las universidades valencianas y de la sociedad civil, además del consejero de Educación, Universidades y Empleo, José Antonio Rovira.
En su intervención, Pagán ha compartido su preocupación por el borrador del Real Decreto que regula el acceso a la universidad española de alumnos extranjeros elaborado por el Ministerio de Universidades. En opinión de Pagán, «dinamita en gran medida la internacionalización de las universidades españolas, públicas y privadas. Si sigue adelante en los términos propuestos, expulsará a los alumnos extranjeros a otros sistemas universitarios europeos, una pena y un riesgo. Confiemos en que la redacción final de la norma mejore».
Pagán se refiere al borrador de decreto de acceso y admisión de alumnos extranjeros que plantea el Ministerio de Educación por el que los estudiantes extranjeros no comunitarios tendrán que pasar unos exámenes de selectividad que valorarán su conocimiento y nivel de lenguas para matricularse en un grado universitario en nuestro país. Unas pruebas presenciales similares a las españolas.
El rector ha reparado, asimismo, en el «dramático» invierno demográfico que «pronto se hará presente en la Universidad». A este respecto, ha planteado por qué «a nuestros jóvenes les cuesta tanto dejar la juventud y pasar a la vida adulta, emanciparse, comprometerse, formar una familia». Así, por un lado, se ha referido a las dificultades de los jóvenes para acceder a la vivienda, la tasa de paro o la precariedad laboral, aunque ha remarcado que la «raíz del problema» es antropológica.
«Hoy la cultura dominante desprecia la condición de adulto, ésa que se alcanza cuando uno es capaz de convertirse en prójimo, de amar al otro como se ama a sí mismo, de renunciar a intereses particulares en favor de un bien común. En definitiva, cuando uno es capaz de comprometerse libremente con el otro. Quienes trabajamos y vivimos con jóvenes sabemos, al escucharlos, que muchos de ellos sufren una crisis de confianza a la que no se ha sabido dar respuesta desde la universidad. Hemos olvidado nuestra llamada a transformar la sociedad y nos hemos limitado a adaptarnos a ella, asumiendo muchas veces sus criterios cientificistas, pragmáticos y utilitaristas, a los que la universidad nunca debió ceder», ha afirmado.
En ese sentido, Pagán ha hecho énfasis en que los jóvenes sienten «el anhelo de algo más elevado» que les ayude a dar respuesta «a los grandes interrogantes de la vida y a la verdadera emergencia que vivimos, que aborde todas las dimensiones de la persona; no rebajemos este ideal a una mera empleabilidad o capacitación técnica».
Por otro lado, Pagán ha avanzado distintas novedades de este curso que se inicia, en el que se celebran los actos centrales del quincuagésimo aniversario de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer, que retorna este curso a su sede original en la calle Trinitarios, un espacio único en el que convergen las facultades de Teología; de Ciencias Jurídicas, Económicas y Sociales; de Filosofía, Letras y Humanidades; y de Derecho Canónico.
Entre otras, se ha mejorado el modelo integral de acompañamiento al alumno con el refuerzo de la figura del profesor-mentor, se ha puesto en marcha un proyecto que busca revisar los planes de estudio en función de los resultados de aprendizaje y se va a iniciar el programa Maestros y testigos para profundizar en pensadores que han sido clave para el desarrollo del humanismo cristiano.
Asimismo, el rector de la UCV ha agradecido al conseller Rovira su presencia en el acto y ha expresado también un agradecimiento expreso a la rectora de la Universitat de València, Mavi Mestre y a la rectora de la Universidad Internacional de Valencia–VIU, Eva Giner, así como a los vicerrectores del resto de universidades valencianas, por participar en este acto.
Por su parte, el gran canciller ha subrayado que «toda universidad debe tener unos objetivos concretos y evaluar después si se han alcanzado, pero una institución como la nuestra debe también marcarse unas metas a largo plazo que, a veces, no son evaluables, pero sí importantes. Son los objetivos que dan el sentido último a lo que hace y ofrece a los estudiantes y a la sociedad».
Así, el gran canciller ha aludido a tres de ellos: «El primero de ellos hace referencia al Papa Francisco cuando dice que la educación debe servir para mejorar el mundo. El horizonte de trabajo de la universidad no puede ser autorreferencial, siempre deben ser las personas».
«En segundo lugar, la Iglesia concibe la universidad como un espacio privilegiado de diálogo con la cultura y con la sociedad. A la UCV no vienen alumnos selectos ni son todos católicos, nuestros estudiantes llegan de todos los ámbitos sociales. Aquí tenemos un espacio ideal para dialogar con ellos, con sus inquietudes y preocupaciones; y para hacerlo también con sus familias. Siempre con delicadeza y respeto, sólo así es posible el diálogo. Las actitudes inquisitoriales y los señalamientos públicos no son propios de las universidades, de las instituciones culturales y académicas, que han de ser lugares de encuentro e intercambio de ideas», ha aducido.
De la misma manera, la universidad debe aspirar a la «excelencia académica». «Siempre hay que mantener el rigor y la exigencia», pero los cristianos deben «aspirar a algo más, el fruto de su labor educativa en las personas», ha aseverado el gran canciller: «Hemos de acompañar a los estudiantes en su crecimiento, en su maduración humana y en su formación cristianas. Vayamos más allá del éxito; cada estudiante es una persona que debe ser acogida».
En su intervención, el consejero de Educación ha afirmado que «la Generalitat Valenciana se compromete a seguir apoyando a todas las universidades, tanto públicas como privadas, para que continúen siendo referentes de excelencia académica, innovación y compromiso social».
Rovira ha destacado en su intervención que «la UCV sigue apostando por la investigación científica como uno de los pilares fundamentales de su misión universitaria. En este sentido, la colaboración con el Instituto de Investigación Sanitaria de La Fe ha permitido lanzar la segunda convocatoria de ayudas a la investigación con el objetivo de asegurar que los resultados científicos generados en la universidad no se queden únicamente en el ámbito académico, sino que tengan una aplicación directa en los pacientes y en las empresas».
«La UCV, con alumnado y profesores provenientes de más de 60 países, ha hecho de la diversidad cultural uno de sus principales activos. Esta apertura al mundo no sólo enriquece la experiencia académica de los estudiantes, sino que también los prepara para enfrentar los retos profesionales en un entorno globalizado. Los programas de intercambio, los convenios con universidades extranjeras y la participación en proyectos internacionales permiten que las personas que integran esta universidad tengan una visión global de los desafíos sociales», ha expuesto.
De igual manera, el consejero ha felicitado a la UCV por el inicio de dos nuevos másteres, en hemodiálisis y en competencias avanzadas para maestros: «Con esta ampliación de su oferta académica, la UCV refleja su dinamismo y relevancia en la formación universitaria de nuestra Comunidad. Cada uno de sus estudiantes refleja una apuesta de futuro para nuestra universidad, el compromiso de la UCV por la excelencia académica y los valores humanos».
«Al formar parte de esta universidad los alumnos no sólo se integran en una comunidad académica de primer nivel, sino que también se suman a un proyecto educativo basado en principios morales que busca formar profesionales íntegros comprometidos con el bien común», ha añadido.
El acto de apertura del curso ha contado también con la participación del profesor Pablo Vidal, de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, que ha impartido la lección magistral El turismo de naturaleza: la transformación de un lugar indómito. El caso de Islandia.