El portavoz de políticas LGTBI de Compromís en las Cortes Valencianas, Francesc RoigCompromís

Compromís llevará a la Fiscalía la educación afectivo-sexual de los centros diocesanos valencianos

Tanto el Arzobispado de Valencia como Colegios Diocesanos niegan que sean terapias de conversión sexual, sino educación «desde una concepción cristiana de la persona, de la vida y del mundo» y con el conocimiento de las familias

El portavoz de Compromís en las Cortes Valencianas, Joan Baldoví, y el portavoz de políticas LGTBI de la formación nacionalista en la Cámara autonómica, Francesc Roig, han anunciado que llevarán a la Fiscalía el proyecto «Libres por amor – Libres para amar», que se imparte en colegios diocesanos valencianos.

Los responsables de Compromís han aseverado que «el programa creado por Lourdes Illán se basa en posturas anticientíficas, que atentan contra la dignidad de las personas LGTBI y habla abiertamente de «terapias reparativas», al considerar que la homosexualidad debería contemplarse como una enfermedad mental y que decir lo contrario es una burla para la ciencia”.

En los documentos para profesorado preparados por la formadora de la Fundación San Vicente Mártir de colegios Diocesanos, a los que habría tenido acceso Compromís, Illán también apelaría a trabajar en clase la «terminología sexual correcta» y que los docentes de los centros explican que los términos homosexual, gay o lesbiana no son correctos, que es necesario utilizar el concepto AMS (Atracción hacia el Mismo Sexo) y que sólo hay dos maneras de ser persona: hombre o mujer, según explica el partido en un comunicado.

En este sentido, Baldoví y Roig concluyen que «estos centros concertados no son espacios seguros para el alumnado LGTBI, a los que se les niega su existencia y actuaremos con contundencia».

Además de denunciar ante el Ministerio Fiscal los materiales de promoción de talleres afectivo-sexuales al alumnado como «preámbulo de pseudoterapias homófobas», en sus palabras, Compromís exige a la Consejería de Educación que suspenda de forma inmediata el programa de educación afectivo-sexual de los centros diocesanos.

Según Roig, los responsables políticos de la Generalitat Valenciana «no pueden seguir mirando a otro lado mientras en centros educativos se está haciendo promoción abierta de las pseudoterapias de conversión homófobas. Exigimos que la inspección educativa intervenga y que se envíe de oficio a la Unidad Especializada de Orientación en Igualdad y Diversidad a todos estos centros».

Una educación elegida por las familias

Hace ya un mes, el Arzobispado de Valencia ha negado la formación afectivo-sexual que se imparte en los centros diocesanos incluya terapias de conversión sexual, sino que se trata de un programa que «fomenta un entorno respetuoso en el que se promueve la aceptación de toda persona y se rechaza cualquier tipo de discriminación». Asimismo, y ante la «trama homófoba» que asevera Compromís, subraya que los centros educan «desde una concepción cristiana de la persona, de la vida y del mundo», todo ello «amparado en la legislación en materia educativa» y con «todo acompañamiento del alumno se realiza en coordinación con sus familias».

«⁠Esta formación, que sigue un programa y que se oferta desde el año 2007, se trata de un proyecto integrado en los colegios y se imparte con conocimiento de las familias. La acusación de que en esta formación afectivo-sexual se incluyen terapias de conversión sexual es falsa», incide el Arzobispado que finaliza su desmentido con otra aseveración: «No se puede pretender que renunciemos a nuestros principios y valores para educar a los alumnos cuyos padres libremente matriculan a sus hijos en nuestros colegios. El respeto a todas las personas no exige que renunciemos al carácter propio de la escuela católica», concluye.

Por su parte, Colegios Diocesanos también rechaza las palabras de Roig y, en la línea del Arzobispado, defiende que la realidad es que es «un programa que fomenta un entorno respetuoso en el que se promueve la aceptación de toda persona, se rechaza cualquier tipo de discriminación y se respeta la dignidad de todos».

«La Iglesia defiende su libertad para acompañar a las familias que desde sus propios principios eligen una educación católica para sus hijos, del mismo modo que respeta la libertad de los demás para pensar de manera distinta», ha puntualizado el colectivo docente.

Mazón defiende su actuación

El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha defendido que el Consell ha reaccionado «al primer minuto» ante la denuncia de presuntas terapias de conversión sexual en centros concertados y ha puesto como ejemplo de ello el caso de Alaquás (Valencia).

«En cuanto hemos tenido la más mínima denuncia, lo hemos puesto en manos de la Fiscalía de manera inmediata», ha recalcado en declaraciones a los medios este lunes en Torrente (Valencia). Mazón ha añadido que la Generalitat que preside es «la única administración que ha puesto en marcha (medidas) ante cualquier denuncia» por estos casos. «No somos sospechosos, más bien al revés», ha deslizado.

En este sentido, ha afeado a Compromís que ahora haga «política» con estos casos mientras durante los gobiernos del Botànic no hiciera «absolutamente nada». «Le agradecería que durante los ocho años que ha estado en el gobierno de la Generalitat hubiera hecho todo esto», ha expuesto.

El jefe del Consell ha expresado que le «llama la atención» que la coalición durante «los ocho años que estuvo en la Generalitat» no «trasladó nada» sobre estos casos de terapias de conversión. «A lo mejor, desde la sede de Compromís resulta que tienen más medios que toda la Generalitat junta», ha deslizado. Además, ha instado a la formación a que, si «tiene algún dato, lo ponga a disposición de la Generalitat, en vez de hacer política con ello».