Imagen de la Gran Riada de Valencia en 1957Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP)

Las inundaciones más destructivas que han azotado a la Comunidad Valenciana a lo largo de su historia

La región ha sufrido 22 de los 55 episodios de mayores precipitaciones de lluvia registradas en España desde el año 1900

Cuando alguien piensa en lluvia en España, no piensa precisamente en el Mediterráneo o en la Comunidad Valenciana. Y es que este fenómeno atmosférico no es muy común en la terreta, pero ha habido ciertos momentos de la historia de la región en donde la cantidad de agua desmedida y las tormentas de gota fría han provocado grandes catástrofes e inundaciones, arrasando con todo a su paso.

La tragedia más conocida y la más devastadora es la conocida como La gran riada de Valencia, en 1957. Cuando las intensas lluvias produjeron que el desvío del cuenca del río Turia, a su paso por la ciudad, que causó al menos 81 muertos y cuantiosos daños materiales. Una herida profunda para los valencianos, que marcó toda una generación y todavía sigue presente.

Imagen de la Gran Riada de Valencia en 1957Wikipedia

Esas fuertes lluvias afectaron también a otras zonas de la provincia, como el barranco del Carraixet, que se desbordó y sus aguas se juntaron con las del Turia antes de llegar al mar, cerca de Alboraya. Otro foco importante de precipitaciones fue la cuenca del Palancia, que alcanzó el récord histórico de 900 m³/s y se desbordó en Sagunto.

Aunque la riada del 57 es la más conocida por su enorme impacto, las inundaciones derivadas de fuertes temporales de DANA y gotas frías en el territorio valenciano no han sido escasas. La Comunidad Valenciana ha sufrido 22 de los 55 episodios de mayores precipitaciones de lluvia registradas en España desde el año 1900, según un informe del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante (UA).

La primera gran riada, antes del 57

Antes de la Gran Riada del 57, el 28 de septiembre de 1949 una tormenta de proporciones bíblicas azotó toda la región. Las precipitaciones más intensas se concentraron en la zona de montaña entre Castellón y Valencia, donde, por ejemplo, el barranco del Carraixet se desbordó violentamente, causando estragos en localidades como Bétera, donde el agua alcanzó niveles nunca antes vistos, inundando viviendas y arrasando con todo a su paso.

La ciudad de Valencia también sufrió los embates de la tormenta, pero fueron las poblaciones más costeras como Rafelbunyol, Masamagrell y Almácera, las que registraron los mayores acumulados de lluvia, superando en algunos casos los 100 litros por metro cuadrado.

Imagen del municipio de Almácera, en Valencia, tras la riada de 1949Blog Almácera

En Castellón, el desbordamiento del río Seco provocó una tragedia que se cobró la vida de una decena de personas, en su mayoría niños. Estas inundaciones masivas fueron el resultado de una combinación de factores: lluvias torrenciales, la ocupación de cauces fluviales y una falta de infraestructuras adecuadas para hacer frente a este tipo de eventos naturales.

Récord nacional del último siglo

Más adelante, el 20 de octubre de 1982 llegó a Valencia otra de las grandes riadas que se recuerdan al desbordarse la presa de Tous. El incidente dejó 9 muertos y 3000 millones de euros en daños, cayendo hasta 1.000 litros de agua por metro cuadrado, y encabezando así el ranking nacional de máximas precipitaciones en 24 horas del último siglo.

La rotura de la presa de Tous, que guardaba en su interior 120 millones de metros cúbicos de agua embalsados, a causa de numerosos errores en la construcción, inundó la comarca. Treinta pueblos se vieron afectados, con 38 muertos y 300.000 damnificados.

Imagen de las inundaciones en la provincia de Valencia tras la riada de 1982Meteored/Eltiempo.com

La llegada del siglo XXI tampoco fue impasible con la Comunidad Valenciana. A finales de octubre del 2000 llegó otra gota fría otoñal, que afectó especialmente a la provincia de Castellón y el norte de Valencia. Las cantidades recogidas en este temporal fueron de las más altas y llegaron a superar los 600 litros de agua por metro cuadrado, además de desbordar diversos ríos.

En septiembre de 2009 las lluvias dejaron estragos por diversos puntos de la región, siendo el municipio de Burriana, en Castellón, el más afectado, con 308 litros por metro cuadrado.

En 72 horas, Emergencias rescató a 24 personas y desalojó a medio centenar, y el teléfono 112 gestionó más de 4.000 intervenciones por fuertes precipitaciones.

La catástrofe más reciente

Más recientemente, hace tan solo 5 años, el sur de la Comunidad registró la peor gota fría de su historia. Comarcas como La Vall de Albaida y la Vega Baja fueron las más afectadas, con lluvias que dejaron gastados 1.000 kilómetros cuadrados arrasados. Un total de 30 municipios estuvieron afectados y hubo dos víctimas mortales.

La DANA de septiembre de 2019 obligó a desalojar a miles de personas de la Vega Baja durante días. Cinco años después, los alcaldes de las zonas afectadas todavía reclaman que hay obras por ejecutar, algunas de ellas importantes para evitar futuras inundaciones.

A pesar de las consecuencias negativas de estas catástrofes que han azotado la Comunidad Valenciana, también han surgido diferentes iniciativas para enmendar errores del pasado y así evitar futuras inundaciones y daños al territorio. Este es el caso, por ejemplo, del plan Vega Renace de la Generalitat Valenciana, surgido después de la DANA del 2019 en Alicante y que contempla obras de mejoras en las instalaciones, de las cuales algunas ya han sido ejecutadas.