Morant eleva la presión sobre Feijóo apoyando los Presupuestos de Mazón para que él haga lo mismo con Sánchez

La reciente DANA que ha devastado la Comunidad Valenciana y dejado graves daños humanos y materiales ha generado la necesidad de respuestas rápidas y contundentes por parte de las distintas administraciones públicas. Es aquí donde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha visto la oportunidad de volver a hacer «de la necesidad virtud».

En este contexto, la ministra de Ciencia e Innovación y secretaria general del PSPV-PSOE, Diana Morant, ha anunciado este miércoles que su partido votará a favor de los Presupuestos de la Generalitat Valenciana, liderada por el 'popular' Carlos Mazón. En un gesto que parece representar «unidad institucional», el apoyo de los socialistas eleva la presión hacia el PP de Alberto Núñez Feijóo para que respalde, a su vez, los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de Sánchez, calificados como «cruciales» por el presidente para asegurar ayudas a las zonas afectadas por la tragedia.

Morant ha defendido la posición del PSPV de respaldar las cuentas autonómicas, argumentando que el objetivo es «blindar» las ayudas para las familias y municipios valencianos que necesitan reconstruirse tras la DANA. Según explica, los representantes de su partido en la Comunidad Valenciana apoyarán las cuentas del Gobierno valenciano «para que recojan adecuadamente las necesidades de los vecinos y vecinas», en lo que describe como una especie de acción de solidaridad interinstitucional.

Sin embargo, esta maniobra parece un intento de los socialistas de utilizar la tragedia para ganar terreno político y forzar al PP a que devuelva el apoyo a Sánchez en el Congreso. La postura del socialismo regional, alineada con el mensaje que lanzó Sánchez desde la Moncloa, sirve para aprovechar la necesidad de los valencianos de una respuesta rápida para presionar a Feijóo y asegurar el respaldo que el presidente necesita para que los PGE de 2025 avancen, apuntalando así su permanencia en el poder.

Durante una entrevista este jueves, Morant ha sido preguntada por si condicionan este apoyo a que Feijóo haga lo propio. La ministra ha asegurado que «cada uno que haga lo que considere que tiene que hacer y que esté en la medida de lo que le indique su responsabilidad», pero asegura que su voto a los presupuestos de Mazón no está condicionado por los PGE, ya que su obligación es «hacer una oposición constructiva»

«Dolor como moneda de cambio»

La decisión de Sánchez de condicionar que lleguen ayudas adecuadas a los afectados por la DANA a la aprobación de los PGE ha desatado una oleada de críticas. Durante su comparecencia, Sánchez justificó esta postura señalando que «necesitamos unos nuevos Presupuestos Generales del Estado» y que su aprobación permitirá una respuesta «más eficaz y equitativa» para los damnificados. Además, el líder socialista enfatizó que las nuevas cuentas beneficiarían especialmente a la Comunidad Valenciana.

Esta postura ha sido interpretada por el Partido Popular como una medida de presión injustificada, y desde sus filas acusan al presidente de estar utilizando una tragedia humanitaria para promover sus propios intereses políticos. Los 'populares' advierten de que no van a apoyar unos presupuestos que ni siquiera se han presentado y el presidente de la Generalitat Valenciana afea al Gobierno que «utilice el dolor como moneda de cambio». Durante una entrevista en Trece este martes, Mazón advertía de que «con Presupuestos o no, la ayuda la necesitamos ya», evidenciando que las ayudas a los damnificados podrían aprobarse sin depender de los PGE.

Esta presión sobre el PP puede consolidar la permanencia de Sánchez y evitar la convocatoria de elecciones anticipadas, para lo cual necesita el respaldo parlamentario que hasta ahora ha estado bloqueado por sus propios socios en el Congreso, entre ellos Junts, que ha condicionado su apoyo a concesiones que el Ejecutivo aún negocia.

La iniciativa de Morant de respaldar los Presupuestos autonómicos de Mazón se presenta por parte de la ministra como «un acto de cooperación y unidad», pero deja en un brete a la dirección nacional del PP y puede provocar un posible enfrentamiento entre Feijóo y Mazón. Así, esta «alianza» se puede interpretar como un movimiento de los socialistas valencianos para vender una imagen de «unidad en la tragedia» en beneficio propio, en tanto que Sánchez se sirve de esta estrategia para forzar el respaldo de un PP del que podría servirse para sacar adelante su agenda en el Congreso.

La sombra de unas elecciones

Para Sánchez, la aprobación de los PGE es esencial, no para garantizar los recursos en las comunidades afectadas por la DANA, sino para asegurar su estabilidad política en un momento en que los apoyos de sus socios parlamentarios penden de un hilo. Desde septiembre, la negociación de la senda de estabilidad, paso previo a los presupuestos, permanece bloqueada y la falta de un acuerdo llevó al Ejecutivo a retirar sus objetivos de deuda y déficit para evitar una nueva derrota parlamentaria. En este escenario, el apoyo de los de Feijóo es un nuevo as que podría asegurar completar la legislatura sin una nueva convocatoria electoral.

Sin embargo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha sido categórica en su rechazo a la propuesta de Sánchez, calificándola de «mezquina» por mezclar las ayudas humanitarias con los intereses presupuestarios del Gobierno. Para la mandataria madrileña, el intento de condicionar las ayudas a los PGE es una «estrategia ruin» que ignora las necesidades de los valencianos.