Un hombre de identidad desconocida acompañaba a la víctima del crimen de la caravana en Castellón

La delegada del Gobierno de Castellón, Pilar Bernabé, afirmó en varios medios de comunicación que esta turista francesa viajaba sola. Para justificarlo argumentó que la mujer pernoctó días antes en un alojamiento en la provincia de Tarragona. Al mirar el registro de hospedaje los agentes comprobaron que durmió sola.

Sin embargo, según ha podido saber El Debate, este detalle no se corresponde con la escrupulosa verdad. La turista sí fue vista en Castellón, concretamente en la zona de Cap i Corp en Alcossebre, junto a un varón. Aparcó la caravana en una zona habilitada a escasos metros del mar. Allí son varios los testigos que se fijaron que iba acompañada de un varón.

Tanto es así que la Guardia Civil cuenta ya con el testimonio de una pareja de personas del País Vasco y los dueños de la caravana de al lado del crimen, que aseguran que lo vieron. No son los únicos, también hay constancia que este hombre y la fallecida estuvieron cenando la noche anterior en Vinarós, que está a media hora de distancia.

Ahora la investigación está tratando de poner nombre y apellidos a esta persona. Se pretende localizarla para tomarle declaración y que explique su repentina ausencia. Los responsables de las pesquisas no descartan que viniera con la víctima desde Francia y que él durmiera en la caravana (para, por ejemplo, cuidarla), mientras ella descansaba en un hotel en Girona.

De estar implicado, habría que saber qué relación había entre ambos y dónde se conocieron, aunque para los investigadores resulta muy extraño que la turista metiese a alguien en su autocaravana sin conocerlo de nada. Es más, que fuesen a cenar juntos. La puñalada en la cara se interpreta también como algo personal.