El lobo reaparece en la Comunidad Valenciana un siglo después con un brutal ataque a un rebaño de ovejas

Lo que para algunos grupos ecologistas sería en el fondo una gran noticia, para el ganadero Antonio Miguel Álvaro supone todo un drama. Y podría haber sido peor. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) ha difundido la denuncia de este hombre, perteneciente a su junta directiva, que asegura que una manada de lobos ha atacado a su rebaño, en la localidad valenciana de Aras de los Olmos, y ha matado a diez de sus ovejas.

Según lamenta el ganadero, los lobos entraron por la noche por debajo de la valla que rodea su recinto, de 5.000 metros cuadrados y con una nave central, y mataron a una decena de sus animales asfixiándolos con mordeduras en el cuello. «Además de causar la muerte de las diez ovejas, provocaron la huida del resto del rebaño, más de 400 ovejas, casi todas preñadas, por el monte», añaden desde AVA-ASAJA.

La organización agraria precisa que familiares y trabajadores pudieron recuperar la gran mayoría de ovejas, pero éstas están «atemorizadas y podrían tener problemas en el parto previsto para el mes de abril». Desde AVA-ASAJA explican a este periódico que este jueves visitarán in situ el lugar donde se ha denunciado el ataque para poder comprobar de primera mano los detalles y realizar más imágenes del suceso.

Según esta organización, la imagen que ilustra esta noticia representa la prueba del «primer ataque declarado del lobo a ganado en la Comunitat Valenciana, lo que constata la llegada de dicho depredador a esta comunidad autónoma y su rápida expansión por España desde que el Gobierno lo incluyó en 2021 dentro del listado de especies protegidas y prohibió su caza».

En realidad, esto no supondría que el lobo ibérico haya llegado a la región por primera vez, sino que habría vuelto, ya que el Canis lupus signatus estuvo presente en toda la Península hasta el siglo XIX. En el caso de la Comunidad Valenciana, su desaparición definitiva se dio a comienzos del siglo XX, de acuerdo con los datos de la Asociación para la Conservación y estudio del Lobo Ibérico (ASCEL).

En todo caso, de confirmarse que es de lobo y no de perros asilvestrados, a quienes los ecologistas atribuyen en numerosas ocasiones estos incidentes, este ataque al ganado en la región sería el primero que se da durante más de un siglo, lo que evidenciaría la recuperación que está experimentando esta subespecie en España durante los últimos años, alcanzando comunidades autónomas de las no consideradas como loberas.

El último censo de lobo ibérico, de hace una década, estimaba que existían unas 400 manadas y unos 2.800 ejemplares, principalmente en Zamora y el resto del noroeste de la Península Ibérica, aunque esta cifra podría haber aumentado considerablemente en los últimos tiempos. De hecho, en los últimos años se ha detectado su presencia en provincias colindantes a la Comunidad Valenciana, como la de Teruel, por lo que su llegada a Aras de los Olmos, cerca del límite con la provincia aragonesa, es completamente plausible.

22 ataques diarios

Según los datos recogidos de las distintas comunidades autónomas desde la organización Artemisan, que también aboga por proteger al lobo y estima su crecimiento en un 26 % desde el último censo, actualmente se producen «más de 8.000 ataques anuales a ganado extensivo, unos 22 ataques diarios, con 10.000 cabezas predadas, 27 al día, lo que supone un gasto anual de 3,5 millones de euros en compensación de daños y más de 4 millones de euros en medidas preventivas».

Ante esta tesitura y «la llegada del lobo a tierras valencianas», desde AVA-ASAJA apuntan a que el ganadero afectado «solicitará unas indemnizaciones justas, ya que afirma que el seguro no compensará las pérdidas sufridas y mucho menos estimadas en el parto, y/o facilidades para reducir la población de este depredador». Ahora el personal técnico tendrá que confirmar ahora si es cierto que, como en el cuento, el lobo también viene al final a la Comunidad Valenciana.