Se cumplen diez años de la misión más peligrosa del Ejército español, una década en Mali
España lidera esta misión de la UE que pretende ayudar a desmantelar las redes del yihadismo en el Sahel
Se cumplen ahora diez años desde que España desplegó los primeros soldados en Mali, concretamente en la base militar de Koulikoro, al noroeste de la capital, Bamako. Se cumple una década de presencia española en una de las misiones más peligrosas en las que ha participado el Ejército español.
A finales de 2012 la ONU pedía ayuda militar internacional para proporcionar asistencia coordinada, conocimientos especializados, capacitación y apoyo para el desarrollo de las Fuerzas Armadas y de Seguridad de Mali a fin de restablecer la autoridad del Estado. Los grupos yihadistas como AQIM, Ansar Dine y MUYAO pegaban fuerte y trataban de derrocar al Gobierno de Bamako.
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La Unión Europea respondió con el envío de la misión EUTM Mali con el objetivo de «proporcionar, en el sur de Mali, asesoramiento militar y de formación a las Fuerzas Armadas de Mali que operan bajo el control de las autoridades civiles legítimas, con el fin de contribuir a la restauración de su capacidad militar con el fin de permitirles llevar a cabo operaciones militares destinadas a restaurar la integridad territorial de Mali y reducir la amenaza que representan los grupos terroristas».
El contingente español en Mali tiene como objetivo fundamental la formación de las Fuerzas Armadas de aquel país
La reacción internacional permitió retener los movimientos yihadistas en el norte del país. Pero la deriva política y social de Mali no ha facilitado la labor de los soldados españoles ni del resto de la Unión Europea.
Los continuos golpes de Estado, empujados en buena medida por Rusia, y la creciente influencia del grupo paramilitar Wagner ha complicado enormemente la labor de la misión europea hasta el punto de que países como Francia y Alemania ya han retirado sus tropas.
Ahora, desde el pasado mes de diciembre, es España el país que lidera la misión en Mali. Nuestro país tiene allí desplegados alrededor de 350 militares, cerca de la mitad del total de soldados que permanecen en aquel país. El general de brigada, Santiago Fernández Ortiz-Repiso es quien dirige la misión. Tal y como destacó en la transferencia de Autoridad del Mando de la misión EUTM-Mali, es fundamental «permanecer en la misión con dinamismo, iniciativa, resiliencia y determinación».