Armada española  Las dos fragatas que exhibieron músculo en Melilla ante Marruecos, en misión con la OTAN

Las fragatas Reina Sofía (F-84) y Canarias (F-86), que el pasado fin de semana recalaron en Melilla tras las últimas provocaciones de Marruecos, que ha intensificado sus reivindicaciones sobre Ceuta y Melilla, se han integrado en una misión de la OTAN. Ambos buques participan en el ejercicio multinacional Dynamic Guard que organiza la Alianza. Ambas fragatas, junto con el buque de aprovisionamiento en combate Cantabria, forman parte de una agrupación bajo el mando del Comandante de la 41ª Escuadrilla de Escoltas, el capitán de navío Ernesto Grueso García.

Con la participación de más de 1.200 efectivos, 7 buques, y diversas aeronaves, el objetivo de Dynamic Guard es elevar el nivel de adiestramiento de las dotaciones. Lógicamente. como en todo este tipo de ejercicios, se apuesta por fomentar la interoperabilidad entre las unidades de la OTAN. En concreto, es estas maniobras se buscará alcanzar un nivel avanzado en las capacidades de guerra electrónica.

El ejercicio se desarrolla en el mar de Alborán entre el 4 y el 8 de septiembre y con su participación, «España muestra su firme compromiso con la Política de Disuasión y Defensa de la Alianza demostrando ser un socio activo y fiable», como subraya la Armada en un comunicado.

Durante su escala en Melilla, las fragatas Reina Sofía y Canarias atracaron en el muelle Nordeste y pudieron ser visitadas por cientos de ciudadanos.

Las fragatas Reina Sofía y Canarias pertenecen a la 41ª Escuadrilla de Escoltas, son la cuarta y la última de una serie de seis fragatas, basadas en Rota (Cádiz). A pesar de su veteranía, que ronda los 32 años de servicio, mantienen sus capacidades plenamente operativas y tienen una presencia continua en la operación Atalanta, en aguas del Mar Rojo y el Océano Índico.