Ejército del Aire y del Espacio  F-18 españoles, de nuevo a la caza de otro dron ruso invasor

Los F-18 del Destacamento Paznic radicado en Rumanía se han visto obligados a despegar de nuevo en una alerta scramble para proteger el espacio aéreo del flanco este por la posible intrusión de un dron en espacio de la OTAN. Los aviones españoles están preparados para intervenir 24 horas al día, los siete días de la semana. Cuando se produce una alerta de este tipo, tienen que estar volando en menos de 15 minutos para interceptar a cualquier aeronave no identificada. La intensa actividad rusa en las zonas fronterizas con países de la OTAN, el denominado flanco este, está obligando a los aliados a una intensa labor de disuasión. El problema es que, en un ambiente de tanta tensión, cualquier chispa puede desencadenar un incidente que se descontrole. La labor de los pilotos españoles está siendo clave en este difícil escenario.

Ya durante la tarde del jueves 17 de octubre, los radares de alerta temprana de Rumanía detectaron e identificaron una posible aeronave no tripulada rusa sobrevolando el Mar Negro con rumbo a territorio rumano. Dos cazas españoles de guardia en la Base Aérea de Mikhail Kogalniceanu participaron en un dispositivo de búsqueda de un dron ruso que llegó a sobrevolar territorio rumano.

A finales del pasado mes de septiembre, los ministros de Defensa de Rumania, Polonia y Letonia firmaron una carta conjunta en la que exigieron fortalecer las tareas de disuasión, vigilancia, reconocimiento y patrullaje aéreo en el flanco oriental de la Alianza Atlántica. Este planteamiento surge en el seno de una reunión convocada por Letonia para analizar y tomar medidas frente a las violaciones del espacio aéreo de la OTAN (especialmente por parte de drones rusos) que han tenido lugar a lo largo de las últimas semanas.

La guerra en Ucrania también ha afectado de manera directa a Rumanía. Las explosiones de drones rusos en territorio rumano, cerca de la frontera con Ucrania, han generado preocupación en Bucarest. Aunque las autoridades rumanas han tratado de minimizar el impacto, la amenaza de que el conflicto se extienda a su territorio es una posibilidad preocupante. Esto ha llevado a que el país redoble sus esfuerzos de defensa y a que se fortalezcan las bases militares con la presencia de tropas estadounidenses y de otros países de la OTAN.

En septiembre, un dron violó el espacio aéreo rumano a primera hora del domingo, cuando Moscú atacaba «objetivos civiles e infraestructura portuaria» a lo largo del Danubio en Ucrania, informó el Ministerio de Defensa Nacional de Rumania. Agregó que Bucarest había desplegado aviones de combate F-16 para vigilar su espacio aéreo y había emitido alertas de texto a los residentes de dos regiones orientales.

También dijo que se llevan a cabo investigaciones sobre una posible «zona de impacto» en un área deshabitada a lo largo de la frontera entre Rumania y Ucrania.