Los servicios de limpieza de las playas gallegas retiran el triple de plásticos de residuos urbanos que de pélets

Más de 10.800 kilos de plásticos procedentes de residuos urbanos han sido retirados ya de las playas gallegas por parte del dispositivo activado por la Xunta a raíz del vertido de pélets del pasado mes de diciembre. La cifra contrasta con la cantidad de bolitas retiradas que asciende a 3.524 kilos.

Los activos puestos a disposición por el Gobierno gallego han conseguido llenar 141 sacos de pélets desde su puesta en funcionamiento. Además, desde el 10 de enero también se han retirado de las arenas alrededor de 10.850 kilos de otros plásticos asimilados a residuos urbanos .

El personal movilizado por el Ejecutivo gallego retiró solo este domingo de las playas unos 24 kilos de pélets, así como 560 kilos de otras basuras presentes en el litoral que podrán ser depositadas en el contenedor amarillo. Estos datos hacen ver la dimensión de lo ocurrido y, sobre todo, la problemática de vertidos de otro tipo que asola las costas españolas.

El operativo de vigilancia, detección y limpieza, por tierra y mar, desplegado por la Xunta está compuesto a día de hoy por alrededor de 350 efectivos repartidos en 46 playas pertenecientes a 20 municipios. Mientras tanto, por mar el Servicio de Guardacostas continúa vigilando la situación manteniendo activos los helicópteros Pesca 1 y Pesca 2 , cuatro grandes buques (el Sebastián de Ocampo , el Irmáns García Nodal , el Ría de Vigo y el Mar de Galicia ) así como ocho patrulleras más pequeñas. Desde el ejecutivo gallego, apuntan que desde el Gobierno Central no aporta ningún medio a la operación en ciertos días y afean la falta de colaboración.

Tal y como apuntan desde la Xunta, es importante señalar que los medios aéreos y marítimos pueden ver condicionada su actuación por las condiciones meteorológicas y por la necesidad de atender otras obligaciones como el apoyo a los más de 4.000 buques pesqueros y alrededor de 1.300 embarcaciones de la comunidad, el salvamento o la vigilancia y control del matorral.

Pese a ello, el Gobierno gallego apuesta por la necesidad de interceptar los sacos en el mar antes de que lleguen a las costas. Esta petición fue recibida por el Gobierno central que consideró imposible dicha misión aunque hicieron uno de algunos medios para ello.