Un votante deposita su papeleta en la urna en un colegio electoral de TeruelEFE

Una abuela de 111 años ejerce su voto en Monforte (Lugo)

Bromeó con los integrantes de la mesa sobre si llegaría o no para echar la papeleta en las europeas

Este domingo los gallegos estaban llamados a votar en la urnas. Los comicios electorales siempre dejan alguna anécdota llamativa. En esta ocasión se ha sumado que era el cierre de los carnavales y que muchos gallegos han acudido disfrazados. Una de estas historias es la de la abuela de Galicia, Genoveva Rodríguez Otero, de 111 años, que ha ejercido este domingo su derecho a voto en el colegio electoral instalado en la casa consistorial de ese municipio.

Allí llegó acompañada de su hija y yerno, mostró su DNI, bromeó con los integrantes de la mesa sobre si llegaría o no para echar la papeleta en las europeas y accedió a sacarse fotos con quienes se lo pidieron.

Cubierta con una manta, entró en silla de ruedas y feliz de haber podido meter su sufragio en urna una vez más. Sobre el resultado, no ha querido hacer una porra

Otra anécdota destacadas han sido el grupo de fieles siguiendo la misa dominical a través de la televisión. Fue una homilía virtual, no presencial.

Otra curiosidad que ha llamado la atención de los gallegos, ha sido ver al expresidente del Celta de Vigo, Carlos Mouriño, como apoderado del PP. A esta se le suma la gran cantidad de personas que han acudido a los colegios electorales disfrazados al ser el cierre del carnaval.

Por redes sociales circulan multitud de imágenes de personas disfrazadas de presidiario, vaquero, bombero, médico, futbolista...

Asimismo, este domingo se ha podido ver por toda Galicia una imagen ya habitual: la de grupos de monjas acudiendo a votar. Lo han hecho, por ejemplo, en el Centro Galego de Arte Contemporáneo de Galicia a primera hora de la mañana.