E presidente del CIS; José Félix TezanosAgencia EFE

Tezanos relaciona la victoria del PP en Galicia con «monjitas organizando el voto de sus asilados»

Las encuestas del CIS vaticinaban la derrota del PPdeG con la pérdida de la mayoría absoluta que mantenía en Galicia

Durante prácticamente toda la campaña de las elecciones gallegas, el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) predijo la derrota del Partido Popular vaticinando la pérdida de la mayoría absoluta en Galicia. Y así lo plasmó en todas sus encuestas preelectorales a la vez que impulsaba la candidatura de la nacionalista Ana Pontón como alternativa a un nuevo Gobierno gallego.

Sin embargo, las urnas dijeron lo contrario. Los ciudadanos gallegos emitieron su voto y otorgaron, por quinta legislatura consecutiva, la mayoría absoluta al PPdeG, siendo la primera de Alfonso Rueda. Un resultado que echaba por tierra todos los vaticinios demoscópicos.

Ante semejante patinazo el presidente del CIS, José Félix Tezanos utiliza la publicación que él mismo dirige, Temas, vinculada inexorablemente al PSOE, para justificarse.

En dicho artículo afirma que «en poco tiempo se acabará asumiendo que la victoria del PP en Galicia ha sido un hecho lógico y esperable». «Lo llamativo y sorprendente», continúa diciendo, «era que hubiera perdido en su feudo más potente y natural». Un argumento que pierde credibilidad por lo que decían sus encuestas día antes de las elecciones.

Lejos de reconocer errores, Tezanos reivindica su trabajo asegurando que no se equivocaron las encuestas, sino que la posibilidad de que el PPdeG perdiera la presidencia de la Xunta era real. Encuestas que empoderaban a la líder del BNG, Ana Pontón, abriéndole las puertas de par en par en sus sondeos durante la precampaña y la campaña. Hasta tres informes situaban al PPdeG con entre 34 y 38 escaños. El resultado real, habla por si sólo, y lejos de los previsiones demoscópicas, los populares obtuvieron 40, lo que viene siendo dos escaños más que la mayoría absoluta.

Tezanos se reafirma en cada una de sus palabras impresas en dicha publicación: «En las última semana de campaña varias encuestas, no sólo la del CIS, vaticinaban la posible pérdida de la mayoría absoluta, lo que encendió las alarmas en las filas del Partido Popular».

Según acusa, eso motivó el «enorme activismo» de los populares con «gratificaciones económicas extraordinarias a las mariscadoras, mensajes enviados al personal sanitario prometiendo mejoras salariales y organizativas, monjitas organizando el voto de sus asilados e internos».

Además, Tezanos atribuye los resultados de las elecciones a «la potencia de la maquinaria electoral del PP y su notable combatividad», sin ni tan si quiera cuestionar un posible error en los pronósticos del CIS. «Su enorme alegría final demuestra lo mucho que temían perder fuelle en esta ocasión», justifica.

Mucho PP y poco PSOE

El presidente del CIS, que se afilió al PSOE en 1973 considera en su artículo que los populares lograron un «triple objetivo: Ganar unas nuevas elecciones autonómicas en Galicia, parar el ascenso de Ana Pontón y el BNG, e infringir una derrota importante al PSdeG». Sin tener en cuenta, sin embargo, la gestión de los gobiernos del PP, desde 2009, que podría tener alguna influencia en los resultados.

Tezanos solo dedica unas líneas a la debacle del PSdeG y no se plantea que su bajada, consiguió solo 9 escaños, se pudiese deber a un desgaste de los socialistas por la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez. De lo contrario, lo atribuye a una parte de su electorado fue «atraído en esta ocasión por la ide de un voto útil al BNG, que podría abrir la puerta a un gobierno progresista que pusiera fin al largo predominio del PP en Galicia».

Crispación y mala educación

En su análisis, Tezanos también considera, pese a lo dicho por la urnas en Galicia, «el voto conservador está retrocediendo entre los jóvenes, las mujeres, los residentes en entornos urbanos y entre los sectores de las clases medias ilustradas». Y afirma que estos sectores ven al Partido Popular «como un partido involucionista y negativo; demasiado dado a la bronca, las descalificaciones y los insultos gruesos».

El presidente del CIS habla de los populares como «propiciadores de la crispación y las malas maneras políticas», autores de «malas maneras» y «mala educación».

Plantea incluso Tezanos que esa mala educación «inquieta a sectores cultos y europeizados de las clases medias». Lo que si no hace el presidente del CIS es explicar a cuántos electores gallegos situaría en esos «sectores cultos y europeizados» inquietos con el PP. Tampoco señala el nivel cultura de quienes no sufren esa inquietud, pero lo que si señala es que «la senda seguida por Casado y Feijóo ha tendido, excepto en lugares donde siempre han sido hegemónicos como Galicia, a encapsularse políticamente en espacios sociológicos demasiado sesgados hacia la derecha dura».

El presidente en funciones de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, ante estos comentarios afirmó en sus redes sociales que «algunos todavía siguen sin entender nada. Ni conocen Galicia ni les importa. Un poco de respeto hacia los gallegos».