Juan Manuel Vieites, presidente de la CEGR. T.

Entrevista en El Debate

Juan M. Vieites: «El señalamiento a empresarios por parte del Gobierno no es una buena política»

El presidente de la CEG considera que se debe reducir la burocratización y crear el «campo de juego adecuado» para que los empresarios puedan crear riqueza

Juan Manuel Vieites, presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia, participó este viernes en el Foro de La Toja donde personalidades como el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo; el candidato electo venezolano, Edmundo González o los expresidentes Felipe González y Mariano Rajoy. El Debate ha mantenido una conversación con Vieites para conocer su punto de vista sobre la situación económica y política nacional y autonómica.

— ¿Cómo valora los primeros meses de la legislatura de Alfonso Rueda?

— Un político lo primero que tiene que hacer es crear un entorno atractivo para el mundo empresarial. El empresario es el que crea riqueza en los territorios y, por lo tanto, es la solución y no el problema. La estabilidad es uno de los puntos fundamentales que pide el mundo empresarial. La administración debe crear el campo de juego adecuado para que las empresas puedan desarrollar sus actividades. Los meses de Rueda, con sus cambios correspondientes, van en una orientación de acomodarse al tejido industrial de la comunidad autónoma.

En los últimos tiempos, la burocracia y los desarrollos legislativos han impedido el desarrollo de muchos proyectos estratégicos para Galicia. Desde mi punto de vista, el judicializar proyectos donde Galicia puede ser un punto de referencia nacional e internacional no beneficia nada.

En los últimos tiempos, la burocracia y los desarrollos legislativos han impedido el desarrollo de muchos proyectos

Habla usted de las trabas de la judicialización en Galicia. Especialmente, esto ha ocurrido con la eólica. ¿En qué se traduce esto?

— En la falta de inversiones. El tejido empresarial quiere desarrollarlas y este tipo de paralizaciones retrasa la implantación. Por una parte, tiene un coste financiero y, por otra parte, hay muchas empresas que no pueden estar esperando 5 o 7 años a que la judicialización se resuelva.

El combustible fósil es el viento y el agua en Galicia. Por lo tanto, que proyectos viables no se puedan poner en marcha perjudican mucho. Ahí está también la pérdida de Next Generation y que perjudica, no sólo al mundo empresarial, sino a la comunidad autónoma.

Hay muchas empresas que no pueden estar esperando 5 o 7 años a que la judicialización se resuelva

Otro de los proyectos más polémicos es Altri.

— Galicia no está sobrada de política industrial. La propia Comisión Europea nos dijo que teníamos que tener más tejido productivo industrial, un 20 %. En este caso, lo principal es que cumpla las normativas productivas, económicas y medioambientales y que se traduce en la viabilidad del proyecto. Si es así, bienvenido sea. Si no los cumple, tendremos que tomar las medidas necesarias. Tiene que haber consenso y la administración gallega, del Estado y comunitaria esté en la misma línea para que el proyecto pueda llegar adelante.

Por otro lado, está la imagen hacia la inversión extranjera para producir tejido industrial productivo. Galicia tiene especialización en distintos sectores como la madera y tenemos que ir avanzando en esos parámetros, no sólo en economía verde sino en economía circular.

Si Altri cumple las normativas, bienvenido sea

¿Cree usted que el empresario es el blanco fácil del Gobierno de Pedro Sánchez?

— Esas ocurrencias que, muchas veces, se producen desde el Gobierno y ese señalamiento a empresarios destacados de distintos sectores que crean riqueza y empleo no es una buena política. La mejor política es la que apoya que se cree esa riqueza. Injustamente se está haciendo blanco fácil en ellos y es innecesario porque detrás de ellos hay una actividad socioeconómica importante. Es injusto y no es una buena política. Con sentidiño hay que intentar prodigar que cada vez haya más empresarios y en nuestro país se cree más riqueza y el trabajador pueda llevar su sueldo para casa y consumir.

Las ideologías hay que dejarlas aparte porque sino el mundo empresarial queda muy castigado.

¿Cómo afectará una prorroga de presupuestos al mundo empresarial?

— Negativamente. Desde el punto de vista ideológico no entro, pero desde el punto de vista económico no es positivo. Es necesario tener unos presupuestos. Hay que avanzar. Europa necesita ganar cada vez más en productividad y que se invierta más aquí. Así intentaremos acercarnos a las economías de China y Estados Unidos.

Ya que saca usted el tema de Europa. ¿Hay margen para encauzar el retraso de la ejecución de los fondos europeos?

— Me gustaría que lo hiciésemos. Yo creo que nacieron mal porque no se contó con las comunidades autónomas. Se quiso centralizar desde el Gobierno y no favorece la facilidad para que podamos desarrollar los proyectos de una manera ágil. Se ha producido que entre los PERTE, los Next Generation y demás se han ido más a temas de administración pública que al tejido productivo. Y los Next Generation son para cambiar el tejido productivo a más digital, más verde y focalizado en las personas. Vamos lentos y hemos sido poco ágiles. Espero que ahora se agilice, pero con sentidiño y donde las ideologías no vuelvan a participar en la redistribución de estos fondos. Tienen que llegar más fluido y sin burocracia que haga que no se pueda acceder a ellos.

— El otro día, en este Foro, Rajoy hizo un chascarrillo con una botella de plástico para criticar el exceso de regulación de Europa, ¿está de acuerdo con él?

— Está claro. El mundo empresarial necesita reglas sencillas. Mientras en otros países se agiliza todo este tipo de cuestiones, en Europa legislamos cada vez más. El otro día leí que, en España por la normativa local, autonómica y del BOE, cada empresario tiene que leer 2.800 páginas al día y eso es impensable. El derecho romano está muy bien pero el mundo anglosajón es mucho más ágil a la hora de implementar normativas. Tiene que existir normativa, pero tiene que ser ágil.

Tiene que existir normativa, pero tiene que ser ágil

¿Cómo afectan a Galicia las concesiones de Sánchez a Cataluña?

— Me opongo a que no exista un equilibrio entre las comunidades autónomas. Hay algunas comunidades que están siendo mucho más beneficiadas en contraposición del tejido social productivo y económico. España es una España de equilibrio y hay que ser conscientes del envejecimiento poblacional y hay que tenerlo en cuenta a la hora de desarrollar políticas fiscales y económicas. No se puede mejorar a unas en contra de otras porque haremos comunidades de primera, segunda y tercera y el Reino de España es uno.