Sargadelos comunica el cierre de su fábrica en Cervo (Lugo) ante la presión del Ministerio de Trabajo

Segismundo García, administrador único del famoso grupo Sargadelos, ha comunicado a los trabajadores de su planta de producción en Cervo (Lugo) su cierre. De esta manera, responde a la multa impuesta tras una inspección de Trabajo en la que le afearon 36 deficiencias y un pago de 5.000 euros.

García ha enviado un burofax a Trabajo, al que ha tenido acceso El Debate, en el que asegura que toma esta decisión «ante la imposibilidad de resolver en plazo las deficiencias y faltas que esa eficacísima Inspección ha detectado en los escritos aquí remitidos y que pueden ocasionar males a la salud de los que aquí trabajamos; por lo que, entendemos que los trámites burocráticos a seguir en el futuro, ustedes nos los indicarán, sabiendo que, lo fundamental, la salud de los operarios, por parte de esta dirección, ya está protegida en la medida de sus posibilidades desde el mismo día de hoy».

El escrito, con carácter crítico a la actitud de la inspección y en primera persona, criticaba la «situación»: «Así es el sistema que ustedes representan, por lo que a este humilde servidor no le queda más remedio que acatarlo», rezaba la carta. «Les riego no interpreten esta actitud como un 'look out' o cierre empresarial. Disfrutábamos tanto con la gestión como padecíamos con sus constantes requerimientos y presuntuosa suficiencia», añade.

«Este contribuyente, ya viejo y harto, suplica que no sean indulgentes en la exigencia del estricto cumplimiento de la legalidad. Eso sí, les ruego que no lo generalicen porque pueden provocar la parálisis productiva del país», finalizó adelantando lo que ha comunicado oficialmente este mismo miércoles.

El grupo pretendía en un futuro cercado expandir el negocio, no sólo de manera nacional, sino también internacional. Sin embargo, la inspección y el «cansancio» –tal y como advertía el propio administrador–han acabado con los planes de Sargadelos.