El día que Ferrol se rindió a cuatro coches chinos: esta marca desembarca en Europa a través de su puerto

Ferrol vive con el drama de encabezar habitualmente la lista de las ciudades gallegas con mayor tasa de paro de Galicia desde hace mucho tiempo. No es de extrañar que ante esta situación cualquier proyecto que prometa crear numerosos puestos de trabajo en la ciudad y su comarca sea recibido por todo lo alto. Es el caso de la iniciativa del grupo BAIC, de China, que acaba de iniciar una ruta comercial para importar los vehículos de su marca Arcfox a través del puerto exterior de Caneliñas, donde empleará su terminal de contenedores y una nave para almacenar los vehículos. Su puesta en marcha llevó aparejada una gran ceremonia este pasado jueves en la que se dieron a conocer cuatro modelos que se comercializarán en España y otros países de Europa.

Para las autoridades ferrolanas no era un día más. La emoción por el inicio de la actividad de este proyecto se hizo patente desde el primer momento. «Estoy un poco abrumado por el acto. Es un día importante», expresaba el presidente del Puerto ferrolano, Francisco Barea, en su discurso ante el público. El alcalde de la ciudad, José Manuel Rey, también reforzó esta idea al remarcar que es un «hito» para la ciudad e incluso se atrevió a chapurrear unas pocas palabras en chino como muestra de afecto a los inversores que han llegado al municipio. A los dos se les pudo ver juntos subidos a uno de los coches durante unos minutos.

Para los representantes de la firma china también fue una jornada clave. Su directora ejecutiva de Arcfox, Zheng Fang. Indicó que «como prometimos en nuestro último encuentro, nos emociona poder anunciar de forma oficial el lanzamiento de los vehículos Arcfox en España y el resto del mercado europeo a través del puerto de Ferrol».

A las instalaciones de Caneliñas han llegado cinco coches y en la presentación se mostraron cuatro de ellos, que se corresponden con un modelo diferente cada uno: S5, alpha S, alpha T y Kaola. La expectación para poder verlos de cerca fue máxima. Los invitados a la fiesta se agolparon y no se cansaron de fotografiarlos una vez abandonaban los contenedores en los que permanecían a la espera. Así, uno tras uno. Después, los curiosos no pararon de montarse en ellos y ver su interior, en el que destacan las grandes pantallas táctiles. La celebración se llevó a cabo en la propia nave del puerto exterior que servirá para almacenar a estos vehículos, que durante un día se convirtió en una especie de discoteca.

«Revolucionar el mercado europeo»

El acto tuvo lugar en pleno desembarco de marchas chinas en Europa, en detrimento de los gigantes locales, que ven con estupefacción cómo pierden cuota de mercado en la transición de la tecnología de los motores de combustión a la eléctrica. «Esperamos revolucionar el mercado europeo», aseguró con convicción Yu Tao, director del departamento de Mercado Extranjero de BAIC New Energy Vehicle Company, durante su discurso. Su primer objetivo es introducirse en España para posteriormente para después continuar en Portugal en otros países europeos.

Los modelos que fueron presentados tendrán unos precios que oscilan entre los 30.000 y 60.000 euros. Dos de ellos, los Arcfox alpha T y alpha S ya han obtenido la homologación necesaria y tienen matrícula española, lo que les permite circular por las carreteras de nuestro país desde este momento, según afirmó la empresa.

A Ferrol han llegado cinco coches (dos en un envío y tres en otro) y en próximas semanas se espera un nuevo cargamento mayor, ya que el grupo BAIC ya ha firmado la venta de 200. La distribución se realizará a través de 24 concesionarios españoles. El grupo chino prevé que, a partir de 2025, lleguen a Galicia alrededor de 5.000 unidades al año, según detalló la directora ejecutiva de Arcfox, Zheng Fang. De este modo, la ciudad departamental se convierte en el principal centro logístico de esta marca en Europa. El socio en esta operación es la compañía Atium Logistic, la concesionaria de espacio en el puerto ferrolano, donde posee unas instalaciones de 9.000 metros cuadrados.

El proceso para hacer posible posible el desembarco de estos primeros envíos arrancó a mediados de febrero, tras hacerse público el acuerdo con la Autoridad Portuaria. En ese momento solo estaba lista la nave, pero era necesario preparar toda la logística para importar los vehículos desde China.

Zheng Fang explicó que se baraja «cualquier ruta» para los barcos que traen los contenedores con los coches, tanto por el Canal de Suez, en Egipto, como bordeando Sudáfrica. La inauguración de esta ruta comercial genera cerca de 50 empleos directos y unos 100 indirectos.

Los dueños de Arcfox

¿Quién es el promotor de esta iniciativa? BAIC, una firma fundada en 1958 y que tiene su sede en Pekín, en China. Se define a sí misma como una empresa cuyo negocio abarca «la investigación y el desarrollo de vehículos completos y piezas, la fabricación, comercio de servicios de automóviles, servicios integrales de viajes, finanzas e inversiones y aviación general». Es un grupo automovilístico de propiedad estatal china. Colabora desde hace años con otra marca europea muy conocida, Mercedes-Benz.

Su marca Arcfox es vehículos de alta gama. Empezó su actividad en 2017 y ya cuenta con centros de investigación y desarrollo en seis países, entre ellos, Estados Unidos, Alemania, Italia, Japón y España, además de China.

Ferrol está «en el mercado chino»

El presidente de la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao, Francisco Barea, define el inicio de esta ruta comercial con Asia como una noticia «muy importante» porque es «un tráfico nuevo» de «vehículos de alta gama» que procede «de un país en el que la mercancía por contenedor es el mercado mundial» y permite a Ferrol estar «en el mercado chino». «Será un objetivo también que nos abra horizonte para nuevos empresas del país asiático, pues que se vuelvan a fijar en Ferrol como hizo esta empresa y que vengan también por Ferrol. Tenemos capacidad de que vengan y, por lo tanto, ese es uno de los objetivos más importantes», relata el mandatario portuario.

Barea también incide en que este tipo de negocios pueden tener beneficios en otras empresas de forma indirecta. «Lo que queremos es que genere comercio y que desde luego, como último eslabón de la cadena es crear empleo. Cuanto más tráfico tengamos desde luego, las empresas de aquí se verán favorecidas porque lo utilizarán, y por lo tanto, ese es el objetivo», asegura.

Actualmente Ferrol recibe «muchos materiales distintos» por contenedor, según señala Barea, que pone de ejemplos al acero, estructuras metálicas o madera.