El calvario de un hombre al que la denuncia falsa de su novia casi lo lleva a prisión
Una mujer de 17 años en La Coruña reconoció que mintió para perjudicar al acusado tras saber que quería romper con ella
Hace apenas un año, el 14 de abril de 2023, una joven de 17 años pidió ayuda desde la ventana de un piso de La Coruña. Allí se presentaron dos agentes de la Policía Nacional, a los que manifestó que desde el día anterior quería abandonar el domicilio en el que vivía con su novio.
Una sentencia recoge que la mujer alegó que su novio no se lo permitía, que le había sujetado por el cuello y le había amenazado diciéndole que la iba a llevar a un club, la iba a poner a trabajar allí y que podía mandar a unos amigos para violar a su hermana o lo haría él mismo. Además, explicó que la había agredido sexualmente en la tarde del día anterior. Al día siguiente, esta presentó una denuncia contra el hombre atribuyéndole diversos hechos violentos y el caso acabó en manos de la Audiencia Provincial, que finalmente lo desestimó tras reconocer ella que había mentido, tal y como ha publicado La Voz de Galicia.
Entre el día en el que ocurrieron los hechos y la sentencia transcurrieron casi 11 meses. En ese tiempo, la Fiscalía exigía una pena de ocho años de cárcel para el acusado, para el que también reclamaba que se le impusiese una «inhabilitación especial para cualquier profesión, oficio o actividades, sean o no retribuidos, que conlleve contacto regular y directo con personas menores de edad, por un tiempo de 25 años» y «la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros en línea recta» de la afectada, «acudir a su domicilio, lugar de trabajo o estudio y cualesquiera otros que frecuentase (aunque no se hallare en ellos), así como la de comunicarse con ella por cualquier medio durante 20 años».
Al acusado se le llegaron a imputar cinco delitos de malos tratos, dos delitos de agresión sexual, un delito de coacciones, un delito de amenazas y un delito de malos tratos habituales.
Rectificación durante el juicio
La sentencia recoge que la denunciante expuso durante el juicio «unos hechos distintos, manifestando que había mentido» en sus declaraciones previas ante la Policía Nacional. «Cuando la fiscal le pregunto por qué dio otra versión en la denuncia, afirmó que quería perjudicar (al acusado) porque estaba muy molesta ya que él quería romper con ella», advierte el fallo.
En relación a los hematomas que aparecen en las fotografías obrantes en el atestado y las marcas que tenía el día 14 de abril de 2023, tanto en el cuello como en los brazos, explicó que «cuando tenían relaciones sexuales se abofeteaban, se agarraban del cuello y de los brazos, pero siempre fueron relaciones consentidas», según la resolución judicial.
Los jueces señalan que no detectaron «en la retractación efectuada signos de alteración psíquica, ni de presión, explícita o tácita, ni por parte del acusado ni de su entorno familiar» y que, de acuerdo con lo señalado, «se aprecia mayor verosimilitud en lo declarado en la vista oral respecto de lo manifestado en sede instructora».
Ante esta situación, la Sala de la Audiencia Provincial de La Coruña indicó que «carece de cualquier tipo de corroboración de que el hecho objeto de acusación ocurriera realmente en la manera que inicialmente se describió, y sin ningún otro apoyo probatorio, la declaración sumarial, posteriormente objeto de retractación, resulta insuficiente para desvirtuar la presunción de inocencia que ampara al acusado y no puede en este caso llevar a la convicción, más allá de toda duda razonable, de la veracidad de los hechos denunciados».