Este es uno de los miradores que ofrecen una de las mejores panorámicas de Galicia
Este es el mirador desde el que se puede ver tanto la Ría de Vigo como la Catedral de Santiago
La plataforma de madera es una de las más fotografiadas porque ofrece una de las panorámicas más espectaculares de Galicia
Galicia cuenta con varios miradores que regalan vistas inigualables de su exuberante paisaje natural. Sin embargo, hay uno en particular que ha captado la atención de turistas y locales por la magnitud de su panorámica, considerada entre las más impresionantes de la región.
Este mirador, que ha pasado de ser un tesoro escondido a convertirse en un destino imprescindible para los visitantes, ofrece una de las mejores perspectivas de Galicia.
Desde su privilegiada ubicación, y si el cielo lo permite, es posible divisar las torres de la majestuosa Catedral de Santiago, un espectáculo visual que deja sin aliento a quienes lo contemplan.
Con la vistas más espectaculares
Aunque durante mucho tiempo este monte fue un secreto bien guardado, la inauguración del mirador ha cambiado por completo la situación, provocando una afluencia masiva de visitantes que desean disfrutar de esta maravilla natural.
El mirador de Monte de la Muralla, situado entre Lousame y Rianxo, se ha convertido en un auténtico fenómeno turístico, atrayendo a numerosos visitantes que buscan capturar una de las vistas más espectaculares de Galicia.
Con sus 678 metros de altitud, este enclave ofrece una panorámica inigualable que abarca desde Vigo hasta la ría de Muros y Noya, haciendo de él uno de los lugares más fotografiados de la región. Es decir, desde el Pico Muralla se puede admirar un amplio horizonte que abarca desde Rianxo, Cortegada y las Islas Cíes hasta Noya y el monte Louro.
Lo que realmente distingue a este mirador, de otros de la comunidad gallega, es su impresionante pasarela de madera, en el alto del Monte Picudo, en el parque eólico de Rianxo, desde la que se puede sentir que se vuela sobre el valle del río Té.
La sensación es la de parecer estar flotando en el aire sobre el impresionante paisaje de las Rías Bajas y ofrece a los visitantes la sensación de sentirse suspendidos en el vacío mientras contemplan un paisaje de ensueño.
En días despejados, incluso, se pueden observar las siluetas de la Catedral de Santiago de Compostela y el Pico Sacro, añadiendo un toque mágico a la experiencia.
Una ruta muy rural
Para acceder a este mirador, se puede llegar en coche a través de una pista forestal y posteriormente, se recomienda continuar andando los 800 metros que lo separan del aparcamiento.
Ascender al pico Muralla puede ser un verdadero desafío debido a los intensos vientos que, en ocasiones, dificultan la caminata. Y es que el tramo sin asfalto es recomendable hacerlo caminando.
A pesar del esfuerzo, es una subida que merece la pena, pues durante la misma los visitantes pueden comenzar a disfrutar de las primeras vistas sobre la ría de Arosa: las aldeas asentadas en la ladera. Además de las vistas, el recorrido permite observar de cerca la fauna local en su hábitat natural, incluyendo vacas, caballos y cabras.
El esfuerzo de recorrer a pie este último tramo se ve ampliamente recompensado al llegar a la cima, donde el aire fresco y la panorámica combinan para ofrecer una experiencia inolvidable.