Un ritual sobre ruedas: el lugar de peregrinación en Galicia para los moteros de toda España
Se ha convertido en un sitio de referencia para rendir homenaje y recordar a los que han perdido la vida sobre las dos ruedas
En Galicia, un monumento se ha convertido en un punto de referencia para los moteros de toda España, especialmente durante los primeros días del año.
Este espacio, cargado de simbolismo, sirve como un lugar de homenaje a los que han perdido la vida en las carreteras, representando tanto la memoria como la unión de una comunidad marcada por la pasión por las dos ruedas.
Desde su inauguración, el lugar ha ganado un significado especial entre los amantes del motociclismo. Para muchos, comenzar el año visitando esta escultura se ha convertido en una especie de ritual, consolidando este monumento como punto de encuentro.
Rueda libre y ráfaga al cielo
El lugar del que hablamos es una imponente escultura ubicada en A Seca, en Poyo, en la provincia de Pontevedra. Conocida como el ‘Ángel Motero’, esta obra de ocho toneladas de peso, representa a un motorista con casco y alas de ángel, arrodillado y sosteniendo una vela en memoria de los compañeros caídos en la carretera.
En la base del monumento destacan las frases «roda libre» (rueda libre en español) y «refachos ao ceo» (ráfagas al cielo); unas palabras que reflejan el espíritu de libertad y el tributo al cielo que caracteriza a la comunidad motera.
Inaugurada el 12 de julio de 2019, esta imponente obra de piedra fue realizada por el artista de Cambados, Víctor Casal, a petición de la asociación motera 'A Rosa dos Ventos' (La rosa de los vientos), con el apoyo del Ayuntamiento de la localidad pontevedresa.
Para muchos motoristas visitar esta escultura no es solo un gesto simbólico sino un acto cargado de significado. Desde su inauguración, el 'Ángel Motero' se ha convertido en un referente para rendir homenaje y recordar a los que ya no están.
Acudir a Poyo durante los primeros quince días del año y en concreto a la escultura del Ángel Motero se ha convertido en una tradición cada vez más popular entre los amantes de las motos.
Este ritual, que trasciende las fronteras de Galicia, reúne a aficionados de diferentes regiones de España consolidándose como un punto de encuentro cargado de significado para la comunidad motera.
Con su creciente popularidad, es probable que siga ganando relevancia, ya que no se trata solo de un homenaje estático, sino de un lugar vivo, lleno de historias, que refuerza el legado de la comunidad motera. Y es que el 'Ángel Motero' se erige como un homenaje perdurable al espíritu de quienes encuentran en las motos una forma de vida.