El sistema electoral vasco: ¿por qué no vale lo mismo un voto en Álava que en Guipúzcoa o en Vizcaya?

Casi dos millones de vascos han podido ejercer su derecho al voto este domingo 21 de abril para elegir a los miembros del Parlamento autonómico. Y una de las claves para entender los resultados, que sin duda serán reñidos, es el peculiar sistema electoral regional.

El Parlamento vasco se compone de 75 escaños pero, a diferencia del resto de sistemas electorales autonómicos, los vecinos de cada una de las tres provincias y circunscripciones electorales eligen el mismo número de parlamentarios que los representarán en la Cámara. De este modo, los 945.874 votantes de Vizcaya, los 587.709 de Guipúzcoa y los 261.623 de Álava tendrán que usar su voto para determinar a qué partido pertenecerán los 25 diputados vascos que cada provincia elige por igual.

En Vizcaya, cada diputado representa a 37.834 votantes, en Guipúzcoa cada uno corresponde a 23.508 electores, y en Álava, cada escaño es representativo de 10.464 votantes. Esto significa que los partidos de Álava para este 21A necesitan menos votos para obtener representación. Por esta razón, conseguir votos en territorio alavés es lo más codiciado por los candidatos vascos.

Los distintos partidos necesitan superar la barrera mínima del 3 % de los votos emitidos en una circunscripción establecida por la ley electoral vasca para poder acceder al reparto de escaños.

Los resultados electorales de 2020

En los comicios de 2020 el PNV necesitó 4.552 votos para obtener un escaño en Álava, provincia en la que obtuvo 9 diputados, mientras que en Vizcaya tuvo que obtener 16.699 votos para sacar un escaño. En Guipúzcoa cada diputado supuso un total de 10.955 papeletas.

De hecho, el escaño que logró Vox en los últimos comicios se logró precisamente en Álava, donde el partido de Santiago Abascal logró conseguir 4.734 votos.