Cómo reconocer el bogavante azul de Galicia

Asimple vista es muy difícil de distinguir, pero si se mira con detalle se aprecia que el tamaño de la cabeza es algo menor y hay gran diferencia de sabor entre el gallego, el escocés y por supuesto el canadiense.

El bogavante es uno de los mariscos más tradicionales y apreciados de Galicia por su carne jugosa y sabrosa. Se trata de un marisco muy similar a la langosta, que puede alcanzar los sesenta o setenta centímetros de longitud. A simple vista el bogavante azul posee un tono azulón oscuro, de ahí su nombre; sin embargo, una vez cocido el lubrigante azul presenta un color rojo intenso. El canadiense tras hervirlo se vuelve más marrón. El gallego es de carne fina y tersa; ideal para hacer en platos como el arroz con bogavante o a la plancha.

El bogavante azul a simple vista se distingue de otros de aguas más cálidas y de tono colorado por las pinzas: las del bogavante azul son más largas que las del bogavante canadiense y posee normalmente una cabeza más grande en proporción a su cuerpo si lo comparamos con el azul.

Es más escaso y más caro

Es uno de los mariscos más valorados en las mesas más exigentes. Su coloración lo diferencia del canadiense, de calidad inferior y color pardo. El azul que se vende recién llegado desde Escocia lleva unas gomas rojas en las pinzas, como se ve en de fotos, para diferencialo del gallego, porque no es una misión sencilla distinguirlos.

Podemos cocinarlo hervido, a la plancha, en salpicón o como ingrediente principal para un arroz caldoso. El cuerpo del bogavante azul está protegido por un caparazón grueso y su abdomen presenta siete anillos. Su carne es blanca, consistente, sabrosa y si es hembra, puede tener en el tórax una parte anaranjada llamada coral.

También llamado lubrigante en Galicia, es un crustáceo marino decápodo. Su longitud es de unos 30-75 centímetros y su peso varía desde los 500 gramos hasta incluso alcanzar los 5 kilogramos, por lo que puede presumir de ser el crustáceo más grande. El precio también varía en función de la época del año. Lo habitual es encontrarlo en el mercado de abastos de cualquier ciudad gallega, por un precio de alrededor de cien euros el kilo.

Recetas

Las recetas de más conocidas son: uno, cocinarlo a la plancha si son piezas de 700g hasta 1 kg de peso; y otra opción más simple es cocido en agua con sal hirviendo durante unos 20 minutos. Pero sin duda, en los platos más solicitados, el bogavante se cocina en salpicón o en arroz caldoso.

El azul habita en el Océano Atlántico, en el noroeste de Noruega, en partes del Mar Mediterráneo y en el noroeste del Mar Negro. Vive en fondos de arena y roca, aprovechando grietas y cuevas, y alcanza hasta los 50 metros de profundidad a temperaturas de entre 11 y 18 grados.

El precio del bogavante gallego es alto porque no abunda. Muchos de los que vemos en mercados gallegos provienen de las costas británicas, de Escocia, por ejemplo, en donde esta especie se da con facilidad. Es cogido con nasas e importado a Galicia, donde se distribuye a toda España. El bogavante azul es uno de los mariscos que más tiempo aguantan fuera del agua. Y que menos aguanta servido en la mesa, porque vuela.