La gastronomía vive su culmen en el Molino de Palacios. «Gastronomía castellana, platos típicos, recetas con historia, vinos de crianza, gran reserva y repertorio en la carta de toda buena comida casera hacen de Molino de Palacios sinónimo de buena mesa», según reza en su página web. Todos aquellos que lo visitan quedan encantados con su lechazo asado al estilo tradicional de la Ribera del Duero, en horno de leña.