EBAU 2024
Las tres técnicas de estudio de Harvard para aprobar los exámenes
Esta claves para superar las pruebas finales han de ir de la mano de dos premisas iniciales: tener una rutina de estudio y otra de sueño
entre el 4 y el 13 de junio, los alumnos de Bachillerato de toda España tendrán que enfrentarse a la Evaluación para el Acceso a la Universidad (EBAU) de 2024. Con la cuenta atrás en marcha, los estudiantes ya tienen los libros subrayados, los esquemas hechos y todos los problemas resueltos. La duda que puede asaltar a algunos de ellos es si su método de estudio ha sido el apropiado.
Una de las universidades más prestigiosas del mundo ha desvelado las técnicas más eficaces (que son también las menos novedosas) para sacar el máximo provecho de las horas de estudio y conseguir aprobar los exámenes, ya sean los finales o la selectividad.
Según Harvard, el primer paso es tener interiorizada la rutina de estudio, pero afortunadamente en los años de colegio es algo que se va fraguando en los sucesivos cursos. Para poder acometer las técnicas del centro, también es necesaria una rutina de sueño que garantice el descanso del estudiante, para que el cerebro se encuentre en disposición de asimilar nuevos conceptos.
Tras estas dos premisas, la universidad asevera que existen tres técnicas que elevan a la categoría de pilar básico del estudio. Según los expertos de esta universidad no solo facilitan la retención de la información, sino que también son aplicables para emplear esos conocimientos en la vida diaria.
La primera de estas claves es hacer apuntes en papel. Escribir a mano facilita la comprensión y el procesamiento de la información en el cerebro, a diferencia de hacerlo en un dispositivo electrónico. Desde Harvard apuestan por la vieja escuela y aseguran que utilizar el bolígrafo en lugar del teclado ayuda a memorizar a mayor velocidad.
En segundo lugar, los expertos de Harvard recomiendan estudiar varias materias a la vez, ya que, según indican, el cerebro retiene mejor los conocimientos si se alternan las materias a lo largo de un mismo día. Y por último, es imprescindible gestionar las horas de estudio, es decir, dejar pasar algo de tiempo entre las sesiones ante el libro. Los pequeños descansos dejan reposar la mente y contribuyen a que la tarde se haga menos tediosa y a evitar distracciones, como mirar el móvil.