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Niños a la salida de una guardería en Fuyang, China

Niños a la salida de una guardería en Fuyang, ChinaEuropa Press

Del hijo único a los tres y un Tinder del régimen: el plan de Pekín para sobrevivir al invierno demográfico

A China le importan los niños, siempre ha sido un objeto de preocupación para las autoridades. Antes, porque había demasiados y ahora, porque hay demasiado pocos. Así, entre 1982 y 2015 la población del gigante asiático solo podía tener un hijo, política que se ha relajado en los últimos años y se ha extendido hasta los tres descendientes.

Tantos años de política del hijo único han pasado factura y ahora China paga las consecuencias. Tanto es así que la natalidad no ha parado de caer, a pesar de las medidas tomadas por el partido comunista para auparla. El número de nacimientos en 2023 marcó un mínimo en su historia, no obstante, los primeros meses de 2024 aumentaron un 10 % los alumbramientos.

En 2013, Pekín comenzó a autorizar a algunas parejas tener dos hijos. El requisito que debían cumplir era que por lo menos uno de ellos fuera hijo único. Este fue un primer paso para equilibrar el envejecimiento de la población que en 2016 fue ampliado a todos los matrimonios. El invierno demográfico había llegado a China y se pasó a la política de los dos hijos.

Del hijo único a la familia numerosa

Estos esfuerzos no terminaban de dar fruto. De hecho, la natalidad siguió cayendo y en 2021 el régimen anunció que, además de permitir tener familia numerosa, se comenzarían a implementar distintas ayudas como bajas de paternidad y maternidad extendidos y mejoras en los servicios de cuidado infantil. Aún así, el número de personas con más de 65 años superó a los menores de 15 en 2022.

Estas medidas no han sido recibidas con aplausos entre muchos habitantes. Los jóvenes chinos consideran que los costes asociados a la crianza de un hijo son prohibitivos, como la educación o la vivienda, pero además, muchos de ellos ya no se plantean ni contraer matrimonio. El primer trimestre del año se registraron en China 1,97 millones de uniones, 178.000 menos que en el mismo periodo del año anterior.

Según Zhou Xiaopu, investigadora de la Universidad Popular d Pekín, esto tiene también relación con la política del hijo único, porque los mayores de 30 que alargan su soltería son predominantemente hijos únicos. Después de toda su vida, explica el profesor, acostumbrados a ponerse a si mismos en primer lugar, aplazar el matrimonio o directamente renunciar a él se convierte en una decisión de bienestar propio.

Un jardín romántico y citas a gran escala

Esta bajada de las bodas preocupa a las autoridades, que ven intranquilos como esto afecta todavía más al descenso de la natalidad y el relevo generacional que permita la supervivencia de la economía del país. Así, algunos gobiernos locales están probando medidas para promover las uniones nupciales. En Guixi, por ejemplo, han diseñado una aplicación de citas para ayudar a sus ciudadanos a encontrar pareja. En otra localidad de la provincia de Jiangxi, han lanzado un curso en internet para formar a la población de Yushui sobre el matrimonio y la familia. También ofrecen gratis servicios de asesoramiento sobre estos mismos temas.

Otra de las prácticas más habituales para fomentar el surgimiento de parejas son las citas rápidas a gran escala. En distintas provincias, los políticos organizan tres horas de actividades y juegos para los jóvenes solteros de las ciudades se conozcan. En la ciudad de Tongling han diseñado incluso un jardín romántico (y público) para fomentar los encuentros, pero esto no es novedad, porque en las principales ciudades de la república popular ya existen desde hace tiempo, donde los más de 200 millones de solteros de todo el país acuden a buscar a su media naranja.

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