Ana Boyer narra cómo el clan familiar ha vivido la ruptura de Tamara Falcó

La vida de Tamara Falcó se ha puesto patas arriba en cuestión de días. Pese a que su ruptura con Íñigo Onieva ha sido todo un escándalo, la marquesa de Griñón ha estado arropada por su familia en todo momento. Tras poner punto y final a su historia de amor y, por consiguiente, a su compromiso, la socialité encontró en la casa de Isabel Preysler su refugio, hasta donde se desplazó también Ana Boyer para ejercer de paño de lágrimas de su hermana.

En medio del huracán mediático, la esposa de Fernando Verdasco ha reaparecido en público en Barcelona, donde ha desvelado cómo está viviendo el clan familiar esta difícil situación. «Nosotros estamos siempre con ella e intentando darle el máximo amor en todo momento. Y sabe que su familia y sus amigos estamos siempre para ella», ha comenzado explicando a las cámaras. Y es que, Tamara y Ana siempre han sido uña y carne, por lo que siempre ha visto con buenos ojos todo lo que a ella le hacía feliz: «Nosotros siempre hemos dicho que lo importante era que Tamara estuviera feliz. Es lo que hemos querido desde el primer momento y mientras nosotros viésemos a Tamara feliz, nosotros lo estábamos también, y eso fue lo importante siempre».

Respecto a la afirmación que hizo la socialité hace unos días sobre la autoría de la filtración del vídeo, Ana Boyer ha querido dejar claro que solo fue una broma y que Isabel Preysler no tuvo nada que ver: «Yo creo que eso no es cierto. No sé si fue porque Tamara hizo un comentario irónico en una de sus apariciones, pero lo decía de broma. Mi madre se enteró a la vez que los demás». Una noticia que pilló por sorpresa a la familia y al mundo entero también. Sin embargo, la mujer de Verdasco considera que ella no tiene que pedir explicaciones al que un día fue su cuñado: «No, no es mi lugar. Creo que eso es algo que tienen que hablar ellos y al final a mí no me toca entrometerme en su relación».

Sorpresa para todos

Dejando a un lado su historia de desamor, Tamara Falcó ha sido la protagonista de la crónica social estos días debido a su participación en el Congreso Mundial de las Familias, donde no solo ha sido tachada por unas declaraciones calificadas de homófobas, sino donde también se han recalcado sus palabras acerca del perdón, dejando la puerta abierta a una reconciliación, algo que Ana Boyer no ve probable en estos momentos. «Yo creo que a ella le pilló de sorpresa y lo ha contestado ella misma, que ella ahora mismo no ve posible eso», ha sentenciado. Y es que, en el caso de que eso se produjese y la marquesa de Griñón volviese a confiar en el que un día fue el hombre de su vida, su hermana la apoyaría contra viento y marea: «Vuelvo a repetir que para mí lo más importante siempre es que Tamara esté feliz. Si Tamara en su felicidad, quiere o no quiere estar con alguien, es cosa de ella. Yo lo que quiero es que mi hermana sea lo más feliz en la vida, que se puede».

Y, tratando las infidelidades, Ana Boyer ha sido clara: «Yo creo que todo el mundo puede decir que a lo mejor perdonaría, no perdonaría. Yo, a priori, te puedo decir que no y luego veo una situación de alguien cercano y pienso que sí. Creo que cada caso es un mundo y, aunque pienso que hay que ser tajante con las infidelidades, yo creo que a cualquier persona le puede pasar». Aunque desde que hicieran pública su relación fueron muchos los rumores sobres las deslealtades del empresario, lo cierto es que la familia nunca llegó a dudar de él. «Yo siempre, como Tamara ha dicho, la vi a ella con plena confianza y yo adopté la misma postura que ella y ella tenía esa confianza que nosotros nos creímos», se ha sincerado la hermana de la protagonista a las cámaras. Una mediática relación que parece haber llegado, para siempre a su fin.