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Amaia Montero confiesa el motivo por el que ingresó en una clínica de salud mental
La cantante ha permanecido un mes ingresada en una clínica de Navarra a causa de un fuerte cuadro de estrés y ansiedad por los preparativos de su nuevo disco
Aunque poco a poco han ido trascendiendo más detalles sobre la cruda realidad que rodea en la actualidad a Amaia Montero, lo cierto es que su delicado estado de salud se ha visto rodeado, en todo momento, de mucho hermetismo. Tanto, que, pese a haber pasado varias semanas desde que se conoció que la cantante había estado alrededor de un mes internada en una clínica de Navarra, no ha sido hasta hoy cuando ha trascendido el verdadero motivo de su misterioso ingreso.
Los primeros rumores apuntaban, entre otras cosas, a la trágica muerte de su padre, fallecido en 2009 a los 58 años edad y causa de un delicado cáncer, algo que se sabe que todavía no ha logrado superar, pero, tal y como ha informado la revista ¡Hola!, la razón que llevó a la afamada cantante a centrarse en su recuperación en una clínica especializada fue un fuerte cuadro de estrés y ansiedad derivado de los preparativos de su nuevo proyecto discográfico, el cual estaba previsto que viese la luz a comienzos de 2023.
Los médicos le recomendaron tranquilidad absoluta, reposo, silencio y desconexión, y ella, en su intento de salir de este bache lo antes posible, acató las pautas de los especialistas desde el minuto uno, de ahí que no se volviese a saber nada de ella desde que publicó la famosa fotografía que hizo saltar todas las alarmas. En ella, Amaia se mostraba visiblemente abatida y con un aspecto bastante desmejorado y esto, sumado a las palabras con las que acompañó la publicación fue lo que despertó la preocupación de gran parte de sus seguidores: «Si la esperanza es lo último que muere y aún no la he perdido, ¿de qué me sirve la vida», escribió.
Mucho ha cambiado la vida de la exvocalista de La oreja de Van Gogh desde que dio el salto definitivo a la fama. Sus primeros años en la industria fueron de lo más idílicos, pues no solo se consagró como la auténtica ‘reina del pop’, sino que, además, fueron muchos los éxitos que cosechó por aquella época, entre ellos, siete discos de platino y el premio a Mejor Artista Español en los MTV Europe Music Awards. Sin embargo, pronto le llegaron los problemas, pues, según recogieron en su día varios medios de comunicación, la disolución del afamado grupo musical al que pertenecía, le terminó pasando factura, al parecer, en muchos sentidos de su vida.
A este problema profesional, años después, se le sumaron otros personales con los que, según su entorno, lo pasó realmente mal. Estos fueron el fin de su relación con Gonzalo Miró y el fallecimiento de su progenitor, un golpe durísimo para ella. Tampoco afrontó de la mejor manera las críticas recibidas por sus actuaciones más polémicas, ni los demoledores comentarios a los que se vio obligada a hacer frente por sus continuos cambios físicos.
Por aquel entonces, ya había reconocido en más de una ocasión que sufría problemas de ansiedad, pero nunca antes llegó a tomar una decisión como la que anunció en ese momento, concretamente, en 2020. Fue en ese mismo año cuando, cansada de todo lo que llevaba arrastrando desde hacía tiempo y de que se hablase más de su aspecto físico que de su profesión, comunicó su deseo de apartarse de la vida pública. Un impasse que dedicó a cuidarse y a recargar pilas.
Su vuelta a la primera plana vino acompañada de una imagen fuerte y feliz de la cantante, pero lo cierto es que los problemas de salud mental no tardaron mucho en volver a llamar a su puerta, aunque si bien es cierto que, al parecer, estos nunca antes le habían llevado a la situación en la que se encuentra ahora mismo. No obstante, todo apunta a que poco a poco Amaia Montero va recuperando su tan característica sonrisa, o al menos así lo ha dejado entrever su entorno más cercano al asegurar que, aunque no estaba atravesando su mejor momento personal, ya se encontraba mucho mejor y realmente ilusionada con el nuevo proyecto en el que ya está trabajando, su quinto disco en solitario.