La Infanta Elena retoma su rutina tras la controvertida decisión de su hija Victoria

La Infanta Elena lleva tiempo demostrando que a ella no hay polémica que la paralice. Ni la marcha del Rey Juan Carlos del país, ni la mediática separación de su hermana, la Infanta Cristina, impidieron que la hermana del Rey Felipe VI siguiese adelante con su vida con la normalidad con la que lo siempre lo había hecho. Y ahora, parece que tampoco lo van a hacer los enigmas que rodean su comentada relación con su hija, Victoria de Marichalar.

En medio de fuertes rumores de distanciamiento entre ambas y de la vorágine mediática desatada tras conocerse su descontento por el hecho de que su hija haya tomado la drástica decisión de dejar los estudios para centrarse en su carrera profesional, la cual ha querido enfocar al mundo de la moda y las redes sociales, Doña Elena ha querido plantar cara al asunto con absoluta naturalidad.

Así lo hizo el pasado lunes, cuando fue vista saliendo de su casa a primera hora de la mañana conduciendo su vehículo particular y, minutos después, llegando a su trabajo en la Fundación Mapfre en una actitud tranquila e indiferente. Una reaparición inesperada que, además, se ha producido después de que la revista Lecturas anunciase que Victoria tenía intención de mudarse a La Zarzuela con su abuela, la Reina Sofía, debido a los continuos desencuentros que mantenía con su madre, una información que enseguida fue desmentida por un portavoz del equipo de comunicación de Casa Real a este mismo medio. «No es verdad, así de sencillo», dijeron desde Zarzuela.

Se pudo conocer, por tanto, que la joven influencer continuaba residiendo junto a su progenitora en su domicilio del barrio madrileño del Niño Jesús, aunque sí es cierto que todo sigue apuntando a que entre la Infanta y su hija existe un notable distanciamiento que ha puesto en jaque su tan idílica relación.

Vic, como la conocen en su entorno, no parece que vaya a renunciar a esta nueva vida ociosa que tanta felicidad le está aportando. Está claro que ella disfruta pisando las ‘red carpet’ más exclusivas del panorama social y explorando este novedoso mundo de las ‘it girls’ en el que tantos éxitos está cosechando. Sin embargo, parece que su madre no está para nada conforme con esta sobreexposición que la acompaña en la actualidad, ni tampoco con el nuevo rumbo que ha decidido tomar y en el que, al parecer, no tiene cabida su formación universitaria, considerada por Doña Elena como algo básico, fundamental y primordial.

No parece haber vuelta atrás, sino todo lo contrario. La hermana de Froilán está encantada con su nueva vida, con los grandes beneficios que la reporta y la cantidad de tiempo libre que extrae de ella. Además, poco a poco sigue dando pequeños, pero importantes pasos adelante en una profesión en la que, por una u otra razón, en muy poco tiempo ha conseguido llegar a lo más alto.