Lo que oculta la reaparición de Alberto y Charlene de Mónaco
Los Príncipes de Mónaco reaparecen en Florencia en medio de rumores de crisis matrimonial
La Casa Real de Mónaco se pronuncia por primera vez sobre la separación de Alberto y Charlene
Tras el descanso de la Semana Santa, las agendas reales han vuelto a activarse y Alberto de Mónaco y la Princesa Charlene han protagonizado su esperada reaparición tras afrontar unos meses marcados por los rumores de crisis en su matrimonio. La pareja ha viajado hasta Florencia para conmemorar el 160º aniversario de la apertura del Consulado del Principado de Mónaco en la ciudad italiana. Según informa La Nazione, el soberano y su esposa aterrizaron el martes por la noche y desde su llegada, no han parado de asistir a numerosos compromisos.
Primero visitaron la Fundación Franco Zeffirelli donde conocieron al cantautor Andrea Boccelli y al cónsul honorario de Mónaco en Florencia, Alessandro Giusti. Más tarde, dieron un paseo por la Piazza San Firenze, lugar que escogieron para reunirse posteriormente con Marco Colasanti, diseñador que ocupa el cargo de la división que tiene la fundación Príncipe Alberto de Mónaco en Italia. En este encuentro, los Príncipes han recibido una pluma de edición limitada llamada I Colori dell’Oceano (Los colores del Oceáno). Por la noche, estuvieron presentes en la cena de gala en la Sala de Cinequecento del Palazzo Vecchio, donde se reunieron aproximadamente unas 300 personas, entre las que destacan autoridades italianas y monegascas.
La reaparición pública del Príncipe soberano y su esposa apenas ha dejado fotografías para el recuerdo, pero con las pocas imágenes que han transcendido, varios medios se han hecho eco de los gestos estratégicos que ha llevado a cabo el matrimonio real. El primer movimiento que ha llamado la atención de muchos ha sido la complicidad y la cercanía que ha mostrado la Princesa hacia su marido y es que, en esta ocasión, la exnadadora aparecía agarrada del brazo del monarca, dando así un portazo a todos los rumores que indicaban la existencia de una supuesta crisis en su relación.
Tras estas continuas muestras de afecto, la segunda clave de esta aparición púbica ha sido el llamativo cambio de imagen que ha experimentado la Princesa ante las cámaras. En los últimos actos a los que ha acudido siempre hemos visto a la esposa del Príncipe de Mónaco lucir prendas oscuras y sobrias que delataban el duro momento personal por el que estaba atravesando tras la infección de la que se contagió en Sudáfrica. Pero ahora, en esta ocasión, ha dejado atrás todos los tonos oscuros para apostar por un outfit blanco de la firma Emporio Armani, compuesto por un dos piezas: una chaqueta estilo bomber de 760 euros y un pantalón de 500 euros.
Más allá de la vestimenta, la tercera estrategia que ha resaltado ante las cámaras ha sido el anillo de compromiso que ha lucido la Princesa Charlene en el dedo anular de su mano izquierda. Hace unos días, Daily Mail informaba que la esposa del Príncipe de Mónaco no llevaba su alianza de casada, algo que hacía que se dispararan todas las alarmas sobre los rumores que garantizaban la crisis del matrimonio. Como respuesta tajante, la royal ha rescatado de su joyero esta pieza con gran significado que deja en evidencia el amor que sigue habiendo entre ambos, a pesar de las constantes habladurías que sostienen lo contrario.