Los detalles de la operación de Carmen Lomana tras desvelar que padece tumor

Carmen Lomana está pasando por uno de los episodios más críticos de su vida. La conocida colaboradora de televisión anunciaba hace unos días durante su presencia en el programa de Espejo Público que había sido diagnosticada con un grave tumor. Según cuenta, se encontró un bulto detrás de la oreja que, a pesar de que al principio no le dio ningún tipo de importancia, según pasaban los días decidió comentárselo a su médico de cabecera.

Fue entonces cuando el profesional le pronosticaba que tenía cáncer de parótida y que debía ser operada lo antes posible. El pasado 4 de mayo, la coleccionista fue intervenida en la clínica Ruber y, por el momento, tendrá que esperar unos días para saber los resultados, aunque todo apunta a que será benigno: «Todavía no se han generado células malignas, creo», explicaba a las cámaras de Gtres a su salida de Atresmedia.

Esta intervención ha supuesto para Lomana un gran susto, aunque, con la entereza que tanto la caracteriza, tiene claro que va a superar esta enfermedad con creces: «Si no me lo hubieran cogido a tiempo hubiese sido muy grave, porque el cáncer de parótida es uno de los cánceres más agresivos, pero conmigo no va a poder. A mí no me doblega la vida», decía.

Según los consejos de los médicos, lo único que tiene que hacer es seguir manteniendo una rutina saludable en su día a día, aunque señala que tiene que procurar que no le de el sol en la cara. No obstante, en el caso de que los resultados no fueran los esperados, Carmen Lomana ha destacado que, por el momento, «no ha pensado ni en quimio ni en radio», aunque reconoce que, dado ese caso, preferiría vivir tranquila lo que le quedara de vida.

Después de su intervención y de este gran susto, la experta en protocolo ha manifestado su deseo de poder disfrutar de los pequeños detalles de la vida y ha explicado que tiene muchas ganas de poder hacer una fiesta rodeada de sus amigos más cercanos, aunque hace hincapié en que tendrá que esperar a estar completamente recuperada para organizarla.

A pesar de que su optimismo siempre está presente durante sus intervenciones ante las cámaras, lo cierto es que en el momento en el que anunció la noticia en Espejo Público, reveló que, antes de partir al hospital, el miedo le paralizó: «Yo estaba muy animada, porque creo que en la vida todo es actitud. Pero, cuando me vinieron a buscar, me rompí. Empecé a llorar de angustia, de miedo, de pensar que a lo mejor no salía», recordaba.

Aunque en un principio su idea era no contarlo públicamente, tiempo después reflexionó que su posición mediática podría servir de gran ayuda para visibilizar el cáncer, aconsejando que hay que acudir al médico siempre que nos notemos cualquier tipo de síntoma, por muy insignificante que pensemos que sea, destacando lo importante que es «llegar a tiempo» en este tipo de enfermedad.