El Rey Carlos III y la Reina Camilla Royal Ascot el 20 Junio
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Ascot, un hipódromo con más de 300 años
Un día como hoy, el 7 de agosto de 1711, la Reina Ana de Gran Bretaña fundó el Hipódromo de Ascot, en Reino Unido
Hace exactamente 313 años que se fundó el hipódromo más famoso del mundo. Una cita donde los tocados de las damas y los sombreros de copa de los caballeros tienen tanto o más protagonismo que las propias carreras de caballos purasangres ingleses que allí se celebran. Su principal evento es el Royal Meeting, que se organiza cada año, desde 1771, en el mes de junio.
El hipódromo de Ascot es también un lugar exclusivo donde dejarse ver. Un evento al que acude año tras año la Familia Real británica luciendo su mejor sonrisa y sus mejores galas. Un acontecimiento social donde manda el rígido protocolo.
Principe de Gales con Zara Phillips y Carole Middleton este año.
Desde 1825, el Royal Ascot empieza con un desfile real, que este año han protagonizado el Rey Carlos III y la Reina Camila una vez más. Como marca el protocolo, el Rey con sombrero de copa y la reina Camila un sombrero coordinado con el vestido.
Hipódromo de Ascot
La Reina Isabel II era fiel a su cita con las carreras de caballos, un deporte que le encantaba. El pasado 2019, por ejemplo, visitó el hipódromo en compañía de la Reina Máxima de Países Bajos dejando preciosas imágenes para el recuerdo.
Isabel II and Máxima de Países Bajos en Ascot en Junio de 2019.
Con solera
En este hipódromo británico ubicado en Ascot, en el condado de Berkshire, se celebran 5 días de carreras de caballos purasangre. Cinco días poder para llamar la atención y lucir los sombreros y tocados más extravagantes de la temporada con un tamaño de al menos 10 cm. de base. Favorecedores vestidos de suaves estampados, completan los estilismos de las damas que rinden año tras año un elegante homenaje a la tradición británica.
Princesa Beatriz y su marido Eduardo Mapelli el pasado 21 de Junio vistiendo como dicta el protocolo.
El hipódromo está estrechamente ligado a la Familia Real británica, por estar situado muy cerca del castillo de Windsor. Es además una propiedad que compró la Corona hace más tres siglos, cuando se fundó. El principal evento anual, el Royal Meeting, en el mes de junio desde 1771. Una cita que convoca a la Familia Real y a un nutrido y selecto grupo de la nobleza británica, con invitación, que se reúnen para ver competir a los mejores ejemplares de caballos de carreras del mundo.
Carlos III y la Reina Camila en Ascot, el pasado 22 de junio.
En todo el recinto hay espacios bien diferenciados, con protocolos diferentes. Por ejemplo, en el Recinto Real, hay que lucir siempre la vestimenta más elegante. A los caballeros se les exige llevar un traje de etiqueta, que incluye un chaqué negro o gris, pantalón a juego, chaleco, y una camisa blanca con cuello y corbata. Además de gemelos, y pañuelo. Los sombreros de copa son un accesorio muy singular y tradicional, y aunque ya no son obligatorios desde 2021, se siguen luciendo con frecuencia.
Ascot, 21 Junio 2024
El evento deportivo consiste en 30 carreras, entre las que destacan la Ascot Gold Cup y el British Champions Day. El broche final de la temporada se realiza en octubre. En total, Ascot celebra actualmente 26 días de competición a lo largo del año.
El picnic o merienda en el campo, es un clásico que no falla a lo largo de los años. La tradición se cumple y las nuevas generaciones siguen llevando sus cestas, en ocasiones con cubiertos de plata.
La Reina Isabel II llegando a Ascot en 2016.
Los llamativos tocados
La vistosidad de los estilismos de los invitados al hipódromo tiene su máxima expresión en los increíbles tocados que algunas damas lucen durante su paseo por el lugar. Un evento de tinte deportivo eclipsado en ocasiones por lo estético.
Una invitada llamativa en Ascot, este mes de Junio.
De alegres colores vistosos y variados tamaños, -en ocasiones desproporcionados para sus estaturas-, los tocados de las damas son de lo más llamativo en la mayoría de las invitadas.
Una invitada con llamativo tocado en Ascot.
La discreción no existe para muchas de las damas que sólo buscan protagonismo. No hay que olvidar que Ascot es también una diversión para aquellos a quienes les gusta apostar por el caballo ganador.
