Los Reyes de Noruega y su hijo y heredero en Oslo
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La monarquía noruega, en vilo tras lo ocurrido con el hijo de Mette Marit
Comenzaba la semana en Oslo con los Reyes de Noruega y su hijo y heredero saludando desde el balcón de palacio con rostros de preocupación y con la ausencia de la princesa Mette Marit que tiene problemas graves con su hijo mayor
hace unas horas el hijo mayor de la Princesa heredera del trono noruego tendría que haber declarado, tras su agresión a una joven de 20 años, y las nuevas y recientes denuncias de otras jóvenes acusándoles del mismo delito. Pero al parecer se ha aplazado dicha cita en la comisaria central de Olso.
Según la prensa noruega, la razón del aplazamiento, es que el abogado defensor, Oyvind Bratlien, no ha podido presentarse ante la policía en la comisaría de Oslo. Así lo ha confirmado a NRK la inspectora que lleva el caso.
Una situación que salpica y sin duda debilita la imagen de su madre, Mette Marit y la de la institución a la que por matrimonio pertenece. El próximo 25 de agosto de 2001, Mettet Marit celebrará su 23 aniversario como Princesa de los noruegos. Una fecha con sabor amargo a juzgar por los acontecimientos.
Marius, un problema
La conducta de Marius, fruto de una relación anterior al matrimonia real de la Princesa Mette-Marit, que fue arrestado el pasado domingo 4 de agosto en Oslo acusado de lesiones y daños corporales a su expareja -han surgido tras ese arresto más denuncias de otras exnovias- parece que están haciendo tambalear los cimientos de la Casa Real. De hecho, hay datos que dicen que el pueblo noruego no ve con buenos ojos la sucesión del Príncipe Haakon, por este motivo.
Tras conocerse lo ocurrido, el joven de 27 años emitió un comunicado a través de su abogado, admitiendo los hechos y dando cuenta de que habría consumido drogas y alcohol.
Haakon de Noruega con Marius Borg
La joven agredida fue hospitalizada con conmoción cerebral como consecuencia de la conducta violenta del Marius. La propia Casa Real noruega confirmo que la Princesa Mette-Marit la visitó en el hospital para interesarse por su estado de salud.
«Para mí, lo más importante es pedirle perdón a mi novia. No merecía lo que pasó esa noche, ni la presión extrema de la prensa noruega y extranjera después. Ser perseguido por fotógrafos y periodistas en un momento como este, sé que ha sido difícil de soportar», señaló el joven tras lo ocurrido.
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Un nuevo sondeo realizado por Infact AS para el diario 'Dagbladet' muestra que casi tres de cada cuatro noruegos no quieren que el Rey Harald abdique. A pesar de su avanzada edad y sus problemas de salud, la mayoría de ciudadanos prefiere que Harald siga en el trono y que este no ceda el testigo a su hijo y heredero, Haakon. Los datos son reveladores: un 73% que no quiere que Harald abdique, frente a un 12,6% que sí y un 13,6% que responde con un «no lo sé».
Mette-Marit, que acaba de celebrar su cumpleaños y en breve será su aniversario de boda, sufre una enfermedad crónica, la fibrosis pulmonar, lo que dificulta su papel como consorte real. Y sus hijo mayor le da, a buen seguro, grandes dolores de cabeza. Lo que aumenta su mala salud y dificulta su papel público.
A todo este panorama que mantiene en vilo a la institución monárquica noruega hay que sumar la inminente y controvertida boda de la hermana del heredero, la Princesa Marta Luisa con el chamán a finales de mes. Y sin obviar que la salud del monarca está tocada. A principios de año el Rey Harald V de Noruega, con 87 años, tuvo que ser ingresado de urgencia en un hospital de Malasia durante un viaje de ocio por problemas de corazón. No corren -sin duda- buenos tiempos para el trono noruego este año.
