La cifra que se embolsará Ana Obregón por la venta de su mansión de Mallorca
El padre de Ana, Antonio García Obregón, construyó esta propiedad en la década de los 70
¿Quién no recuerda los icónicos posados de Ana Obregón cada verano? No era simplemente una foto, era casi un evento nacional. ¿Quién no ha bromeado alguna vez diciendo «hazme una foto estilo Ana Obregón» mientras intentaba imitar su icónica pose? Esa imagen tan reconocible, con las rodillas en la arena, las manos sobre la cabeza, el pecho alzado y el trasero hacia afuera, es parte de la memoria colectiva. Pero esos posados tenían un propósito más allá del glamour: eran su manera de pactar con la prensa, dándoles lo que querían para poder disfrutar en paz el resto de sus vacaciones. Muchos de esos momentos se capturaron en El Manantial, la impresionante villa familiar en Mallorca. Con casi mil metros cuadrados en una sola planta y con vistas al mar en Son Servera, esta casa fue mucho más que un escenario para sus fotos; tras la trágica pérdida de su hijo Áless Lequio, se convirtió en su refugio y su fortaleza.
Volver a El Manantial no ha sido fácil para Ana. Imagínate, en los últimos veranos tuvo que despedirse de las tres personas más importantes de su vida: primero su hijo, luego su madre y por último, su padre. «Aless amaba esta casa», confesó en una entrevista para la revista Hola, «y pase lo que pase, esta casa no se vende». Ana ha sido clara: «Si Anita no existiera, yo no habría vuelto aquí. Ni loca. Hubiera sido imposible soportar tanto dolor sin ella. Pero aquí estoy, con esta pequeña princesa que es una bendición, un verdadero milagro», declaró entonces.
Por eso, la noticia de que la casa está en venta sorprendió a todos. La familia García Obregón ha decidido poner en el mercado su espectacular mansión balear por 35 millones de euros. Ese dinero se dividiría entre ella y sus cuatro hermanos. Pero como suele suceder con propiedades de este calibre, la venta se está manejando con discreción. Según Look, una exclusiva inmobiliaria de lujo está negociando la operación, ofreciendo apenas unas pocas imágenes de la casa, lo justo para que cualquiera se quede sin aliento ante la magnificencia de esta residencia.
Desde que la noticia salió a la luz, la agencia inmobiliaria ha decidido ser más discreta, cambiando el precio visible de la casa por un enigmático «bajo demanda». Quizás la familia haya tenido algo que ver en esta decisión, dada la avalancha de información.
El hermano de Ana Obregón, Javier, sorprendido en la calle por unos reporteros curiosos, no confirmó la venta de la casa familiar en Mallorca. De hecho, se atrevió a decir «es que no se vende», aunque luego aclaró que es un tema confidencial y que no tiene por qué hablar al respecto. Sin embargo, la propiedad sigue listada en el portal inmobiliario, a la espera de un comprador con la oferta adecuada y la discreción necesaria.
Así es El Manantial
Situada en la exclusiva Costa de los Pinos, en Son Servera, Mallorca. Con 6.012 metros cuadrados de terreno y 123 metros de fachada directa al mar, la residencia de una sola planta y 993 metros cuadrados construidos es un verdadero tesoro del diseño mediterráneo, ofreciendo vistas al mar que quitan el aliento.
Al llegar, los visitantes son recibidos por un jardín, que incluye una fuente de mármol y también árboles frutales y un tranquilo estanque de carpas que invitan a la paz y la serenidad. Un garaje cubierto con capacidad para tres vehículos y un aparcamiento adicional con porche completan la oferta. Además, una casa para el personal, con salón, cocina, dos dormitorios y baño, ofrece un refugio separado para invitados que buscan privacidad.
La joya de la corona es la terraza de 1.100 metros cuadrados que se abre a vistas panorámicas del Mediterráneo. Con una piscina, un comedor al aire libre con una mesa de mármol para doce personas, y acceso directo tanto a la playa como a un solárium a nivel del mar, este espacio es perfecto para el entretenimiento y el descanso en un entorno de ensueño.
El interior de la vivienda se divide en tres áreas: la zona de día, con un salón comedor que se extiende hacia la terraza; la zona de noche, con siete dormitorios, todos con baños en suite, accesibles a través de una elegante galería que asegura privacidad y confort; y la zona de servicio, con una cocina completamente equipada, cuarto de plancha y lavandería, despensa y dormitorio para el personal con baño propio.
Entre los detalles más destacados, la propiedad cuenta con un pozo de uso privativo con agua potable y un puesto de atraque a solo 150 metros de la vivienda. Esta mezcla de lujo, comodidad y ubicación privilegiada hace de esta residencia un lugar perfecto para disfrutar en familia o con amigos, ofreciendo un balcón privado con vistas a la espectacular bahía mediterránea. Un sueño hecho realidad en el corazón del estilo contemporáneo.