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El Náutico de Sangenjo: piscina, 4 plantas, 2 ascensores, mil socios y Juan Carlos I como presidente de honor
En 2005 Pedro Campos y su junta directiva nombran a don Juan Carlos como presidente de honor del RCNS, el club de la localidad pontevedresa donde también amarra su barco, 'Valoria II,' Amancio Ortega
Son amigos desde 1993. Navegan juntos desde entonces en el Bribón, participando en la regata de la Copa del Rey en Palma de Mallorca, año tras año, cada verano.
Pedro Campos Calvo-Sotelo es presidente del RCNS desde el año 2000. Un Club Naútico que acoge cada vez con más frecuencia a don Juan Carlos, un destino a donde le encanata venir para poner en práctica su deporte favorito.
Pedro Campos
Pedro Campos, amigo leal y dueño de la casa donde se aloja cuando visita esta localidad gallega el Rey Juan Carlos, es regatista profesional, primer campeón del mundo de la vela gallega, empresario del mundo de las velas, y amante del mar desde los tres años. Su amistad con don Juan Carlos se forjó a bordo de un velero, navegando hace tres décadas. Una amistad, que continúa intacta, también a bordo de un velero. Para el Rey Juan Carlos, cazar y navegar son sus dos grandes pasiones.
«Mi más cordial felicitación al Real Club Naútico... en su 50 aniversario», escribe don Juan Carlos, en el libro que resume la historia del club, como dedicatoria. Un club que nació en el 1951 y que a día de hoy cuenta con mil socios privados, que con sus cuotas lo financian. Con una importante Escuela de vela.
El edificio actual consta de cuatro plantas con vistas al puerto deportivos por tres fachadas. Un gimnasio, un comedor enorme con varias mesas redondas y un gigantesco salón social, lleno de confortables sofás, hacen que este cuartel general de los socios regatistas y de los visitantes ocasionales, sea un enclave muy deseado. No es ni el club más antiguo ni el más bonito de Galicia, pero sí es el más deseado para la prensa española.
El restaurante, donde este martes comió don Juan Carlos, con cocina de la tierra, la zona de juegos infantil con mesa de ping pong y futbolín, y la piscina son también reclamos que gustan mucho a quienes los disfrutan. Dos ascensores, uno de ellos panorámico, hacen que moverse por esta sede deportiva de arriba abajo, sea muy fácil.
Haciendo historia, nos remontamos al principio. El 25 de julio de 1961, a las 7 de la tarde se bendicen las instalaciones del club y una hora más tarde se abren las puertas al público que celebra con un baile esa noche, para los 170 socios fundadores, la feliz noticia. Oficialmente, el club se inaugura cuatro días después con una regata. Balduino y Fabiola de Bélgica fueron ilustres visitantes de aquella época. Comenzó entonces a ser un espacio de deporte y vida social con peso propio. Un destino a tener en cuenta para veranear. Aunque en el siglo XIX, Emilia Pardo Bazán ya visitó esa zona que apuntaba maneras como elegante destino vacacional.
Un hervidero político y cultural, además de deportivo, entonces y ahora. En 1994 don Juan Carlos le concede la distinción de Real Club, algo que ya había intuido su hija doña Cristina de Borbón cuando firmó en 1992 una dedicatoria en el libro de Honor para el Real Club sin tenerla, en su visita durante una regata. Treinta años después, el RCNS es más Real que nunca. Este viernes arranca la regata Juan Carlos I - El Corte Inglés, una edición más, la novena.