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Carolina Marín en Madrid, el pasado día 9 de OctubreJ.I.Viseras

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El divertido plan de Carolina Marín con sidra asturiana

Pixín, arroz con pitu y sidra espumosa. Este es el menú elegido por la deportista en el famoso restaurante 'Gloria' de Oviedo

“Me crié entre mujeres maravillosas, de todas he aprendido mucho, pero hay una especial que ya no está conmigo, con la que aprendí a amar la cocina, los sabores, los aromas… las cosas ricas.

Hace tiempo que quería rendirle un merecido homenaje y agradecerle todo lo que de ella hay en mi, ese día ha llegado:

«¡Va por ti abuela Gloria!», son palabra de Nacho Manzano, el chef de Gloria, el lugar elegido por la campeona Carolina Marín para disfrutar su premio, un premio del que está muy orgullosa y que está apunto de recibir.

Carolina Marín es muy popular. Levanta muchas pasiones allá donde va. Siempre amable y sonriente. Y, estos días, en su visita a Oviedo para recoger este viernes el Premio Princesa de Asturias del Deporte está siendo muy aclamada.

Siete veces campeona de Europa de bádminton y tres veces campeona del mundo, son datos que le avalan en su carrera deportiva. La deportista llegó este martes a Oviedo. En su recibimiento, muy emocionante, se escuchó la música de bienvenida de las gaitas en la puerta del Hotel de la Reconquista. El hotel donde se aloja, donde se celebra la gala de los premios y donde ofreció una rueda de prensa en la que destacó sus logros explicando su historia deportiva. Aprovechó también para disfrutar, como no, de la rica gastronomía de Asturias.

En 'Gloria': pixín y sidra

Oviedo es Capital de la Gastronomía Española 2024, un dato que a Carolina Marín no le pasó desapercibido. La campeona cenó en uno de los locales más populares de la ciudad de Oviedo, propiedad de los hermanos Manzano: Gloria.

Carolina Marín probó muchos de los platos típicos, tal y como le recomendaron. Saboreó el típico pixín , es el nombre con que se llama al rape en Asturias, y el arroz con pitu y por supuesto, las croquetas de la casa.

De postre: torrija y tarta de queso. Y todo, regado con sidra espumosa que se sirve en copa tal y como explica el diario local El Comercio. Carolina comentó al finalizar la velada gastronómica que «le había encantado».