Así es el castillo que fue de Hassan II de Marruecos y ahora vende una inmobiliaria en televisión

El impresionante castillo que se vende, y se puede ver en la televisión, es una espectacular casa de campo que perteneció a Hassan II de Marruecos, ubicada a 40 km de París y que sale ahora a la venta –precio rebajado– por 180 millones de euros, según revela La Agencia, la serie de Neflix que lo anuncia. Tiene unas 100 habitaciones, tres pisos, tres ascensores, cinco salones, y cocinas de última generación, entre otras muchas ventajas. Una joya del mercado inmobiliario.

Mohamed VI, heredero del castillo tras la muerte de su padre, decidió en su día vender esta propiedad a un empresario desconocido. El castillo, que lleva tiempo cerrado y sin uso, en estos momentos está a la venta, y ha sido rebajado de su precio inicial, unos 400 millones de euros, a 180. ⁠

Además, dispone de peluquería, un hammam, un aparcamiento privado, establos para 50 caballos, y alojamiento para el personal de servicio, por supuesto.

Construido en el siglo XII, el castillo de Armainvilliers fue reconstruido en un estilo anglo-normando por el barón Edmond de Rothschild, antes de ser renovado y ampliado por el Rey Hassan II de Marruecos en 1984.

A 40 minutos de París y ubicada en el corazón de una finca de 1.100 hectáreas, esta imponente casa de 9000 metros cuadrados ofrece un entorno único con una zona de caza, 2 estanques, un bosque, una granja orgánica, y mucha historia. A principios de los años 80, esta pasó a manos del Rey Hassan II –fallecido en 1999, cuando le sucedió su hijo Mohamed VI– quien la redecoró a su gusto con todo lujo de detalles al estilo marroquí. Varios mosaicos traídos desde Fez y Marrakech, griferías de oro, baños de mármol, y todo tipo de caprichos. El exterior del castillo, con un lago artificial, también es un despropósito.

La familia Kretz

La familia Kretz, dueños de La Agencia, tiene asignada la misión de la venta dela impresionante propiedad de pasado real. La Agencia es una agencia inmobiliaria francesa familiar de alto standing y que pertenece a una familia muy famosa por ayudar a sus clientes a comprar y vender propiedades únicas alrededor del mundo y contarlo después en un entretenido reality de televisión, «No se parece a nada que hayamos visto nunca», comenta Olivier, el padre de la saga mientras visita la propiedad en coche. «¡Es la casa más enorme que he visto en mi vida!», añade su hijo, Valentín. Su tono ameno y educado y sus buenos guiones han convertido esta serie en todo un éxito televisivo.

Los protagonistas del serial son Sandrine y Olivier y sus cuatro hijos: Martin, Valentin, Louis y Rafael, quienes narran su día a día al frente de la inmobiliaria con todo detalle. Un relato entretenido que combinan con pinceladas de su vida personal, de sus relaciones familiares con la abuela y los nietos y de los viajes que hacen por todo el mundo. Vivencias que comparten detalladamente en cada capítulo televisivo.

Los Kretz son reales, no son actores, y recientemente han abierto las puertas de su negocio también en España, con dos gestiones relevantes: las ventas del Castillo de Pedraza a Luis Álvarez, Santiago Segura y José Mota, y la del ático de la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada.