Reino Unido se burla de España con un sello y una moneda que celebran su ocupación de Gibraltar
Reivindican sus «inquebrantables» vínculos con el Peñón desde su conquista en 1704
El pasado 4 de agosto marcaba el 320 aniversario de la captura de Gibraltar por una flota británico-holandesa capitaneada por el almirante George Rooke que atacó el Peñón. Ahora, Reino Unido planea conmemorar este «acontecimiento clave para la creación de un vínculo inquebrantable entre Gibraltar y el Reino Unido» con la emisión de un sello y una moneda.
«Se espera que la moneda sea de 50 peniques que emitirá la Fábrica de la Moneda de Gibraltar de la forma habitual. El segundo será un sello conmemorativo que emitirá la Royal Gibraltar Post Office», informan el Gobierno de Gibraltar en un comunicado.
Un ataque a traición
El Peñón, situado en la península Ibérica, lleva más de tres siglos bajo el control del Reino Unido desde que, aprovechando la debilidad del Imperio español en 1704 –estaba inmersa en la Guerra de Sucesión para conocer su heredero al trono tras la muerte de Carlos II sin descendencia–, el almirante George Rooke al mando de una escuadra aliada británico-holandesa atacó Gibraltar con su artillería y desembarcó a 2.000 soldados de infantería.
Poco pudo hacer la guarnición española de unos 100 soldados a las órdenes del sargento mayor Diego de Salinas, pero antes de capitular comunicó a Felipe V su decisión de «sacrificarse en servicio a su rey». Al término de la Guerra de Sucesión, el Tratado de Utrecht de 1713 determinaba el reconocimiento de Felipe como sucesor al trono español a cambio de que los británicos recibieran los territorios de Gibraltar y Menorca.
En el artículo X de dicho acuerdo se puede leer lo siguiente: «Su Majestad Católica cede a la Corona Británica, por él y por sus descendientes y sucesores, la plena y entera propiedad de la ciudad y castillo de Gibraltar, juntamente con su puerto, defensas y fortaleza que le pertenecen, dando dicha propiedad absolutamente para que la tenga y goce con entero derecho y para siempre, sin excepción e impedimento alguno».
Sin embargo, esta renuncia estaba condicionada a una serie de puntos que se han ido incumpliendo. Uno de ellos es que la cesión se hacía «sin ninguna jurisdicción territorial y sin ninguna comunicación abierta por tierra». Esta medida buscaba sobre todo evitar el contrabando, que también se prohibía en el artículo. Sin embargo, Gran Bretaña ha incumplido estos puntos sistemáticamente ocupando los terrenos del istmo, ampliando artificialmente el Peñón y ejerciendo un lucrativo contrabando en la región.
Cabe recordar que los ingleses no capturaron Gibraltar para Inglaterra, sino que la ocuparon en nombre del candidato austriaco a la Corona española, el archiduque Carlos. Sin embargo, cuando quedó claro que los Borbones se impondrían en la contienda, el gobierno británico se negó a ceder esta plaza tan estratégica.
Según el comunicado, el año 1704 «fue un punto de partida» para esos lazos «inquebrantables» que empezaron con un ataque por la espalda y se han mantenido en base a un tratado que han incumplido sistemáticamente.