El presidente Xi Jinping durante un desfile militar en Hong Kong en 2017
China
El Partido Comunista de China allana el camino a Xi Jinping para gobernar hasta 2032
Xi ha logrado asentarse en el 'establishment' comunista y romper la tradición de 'alternancia de partido único' que limitaba el mandato a 10 años
El presidente Xi Jinping fue respaldado por el Partido Comunista de China (PCC) para gobernar hasta que tenga casi 80 años a través de una resolución histórica que lo equipara con el presidente Mao.
Aunque faltan un año para las elecciones en las que sólo puede participar el PCC, la medida allana el camino desde ya para que Xi, de 68 años, obtenga un tercer mandato, rompiendo una práctica de partido de dos décadas. Ya en 2018 se había descartado una convención que limitaba a los líderes a diez años en el poder.
El comité pidió al partido, los militares y las personas de todas las etnias que «se unan más estrechamente en torno al liderazgo del partido con el camarada Xi Jinping como su núcleo» y que «implementen de manera integral los pensamientos de Xi sobre el socialismo con características chinas en la nueva era».
Este poderoso comité -un grupo de 400 miembros de los políticos más poderosos del país- el 'Parlamento' del PCC, aprobó la resolución sobre los 'Grandes Logros y Experiencia Histórica de la Centenaria Lucha del Partido', el tercer documento de su tipo en sus 100 años.
En este documento la elite comunista de china, respaldó la administración del país por parte de Xi y la visión que ha establecido para su futuro. Aunque corre el riesgo de alienar a los funcionarios más jóvenes que ahora enfrentan menores posibilidades de ascenso.
«La resolución deja más allá de toda duda, 100% seguro, que Xi ha ganado el estatus de líder de por vida, al menos durante otros diez años, hasta 2032, cuando tendrá 79 años», dijo a The Times Willy Lam, un radicado en Hong Kong.
El plenario de este año allana el camino para el XX congreso del PCC, en el que se espera que Xi asuma un tercer período al frente del gobierno, que lo convertirá en el líder más poderoso de China desde Mao Zedong (1949-1974).
[El liderazgo de Xi es] la elección común, la elección solemne y la elección inevitable de la historia y el pueblo
En un país donde la historia es utilizada tradicionalmente para legitimar el poder, Xi ha aprovechado esta resolución para presentarse como heredero incuestionable del régimen.
«El partido reescribe su pasado para preparar el futuro en torno a Xi Jinping. Vamos a asistir a una forma de ley de silencio aún más grande» sobre las horas oscuras de la historia, estimó para AFP el sinólogo Jean-Pierre Cabestan, de la universidad bautista de Hong Kong.
Hacia la cúspide del autoritarismo
En su mandato inicial de cinco años, lanzó una despiadada campaña anticorrupción que sirvió tanto para restaurar la confianza en el partido como para purgar a sus rivales políticos. Así también, desarrolló políticas represivas en las regiones de Xingjiang, Tíbet y Hong Kong y un abordaje cada vez más asertivo de las relaciones internacionales.
También creó un culto a su liderazgo que aplastó la crítica e introdujo su propia teoría política a estudiantes de escuelas y colegios. La estructura de propaganda del partido también ha hecho su parte. La agencia estatal de noticias china Xinhua calificó esta semana a Xi como «sin duda la figura central en trazar el curso de la historia».
Cuando fue elegido para su segundo mandato en 2017, se había establecido en el núcleo del partido, consagrando sus ideas en la carta constitutiva del partido. Al año siguiente, Xi eliminó el límite de dos mandatos a la presidencia. La reciente resolución sirve para dar legitimidad partidista a su ambición personal.
Xi -ahora en camino a su tercer mandato- ha hecho campaña con la promesa de una «nueva era» para el país, se ha fijado el objetivo de que China se vuelva lo suficientemente rica y fuerte como para ser una superpotencia a la par de Estados Unidos. «Se convertirá en la potencia más importante de la región del Indo-Pacífico, desplazando a Estados Unidos», dijo Lam al The Times
Parte de esa ambición es retomar la isla autónoma de Taiwán, algo que ni Mao ni Deng pudieron lograr, señaló Lam. «El subtexto es que Estados Unidos será expulsado de la región del Indo-Pacífico», agregó.
Ciertamente las tensiones han sido altas entre Pekín y Washington debido a Taiwán y las disputadas aguas del Mar de China Meridional, donde Estados Unidos busca mantener el status quo. Se ha anunciado que Xi celebrará su primera reunión virtual con el presidente Biden este lunes próximo.
