Macron en Hungría
Amenazas y tensión: Macron y Orbán exponen su mala relación en un encuentro en Budapest
El presidente francés reitera en Budapest la amenaza a su «adversario» y «leal socio», Viktor Orbán, de que la UE deje a Hungría sin fondos de recuperación
De «adversarios políticos» a «socios leales», del «diálogo constructivo» a las conversaciones «tensas». El presidente francés Emmanuel Macron y el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, trataron de acercar posturas y superar desencuentros en una reunión en Budapest que terminó con un nuevo choque.
Finalizada la reunión, el presidente francés insistió en la amenaza de la Unión Europea de retirada a Hungría de los fondos europeos de recuperación por la pandemia si el gobierno húngaro no se pliega a las exigencias de la Comisión.
Macron viajó a la capital de Hungría para participar como invitado en la reunión del grupo Visegrad, foro de diálogo del que forman parte Hungría, Polonia, la República Checa y Eslovaquia.
Macron está preparando la presidencia rotatoria de la Unión Europea, que comienza el 1 de enero de 2022, y Budapest era la última capital europea que le faltaba por visitar en su gira previa a asumir la responsabilidad.
El encuentro con Orbán tal vez era el más complicado debido al contexto de choque entre las posturas francesa y húngara.
Socios europeos
Macron comenzó la visita definiendo al mandatario húngaro como «adversario político», pero reconociendo, al mismo tiempo, que Orbán es un «socio europeo» y la Unión Europea debe mantener un diálogo con Hungría «para construir compromisos útiles» más allá de las diferencias políticas.
Antes de la conversación entre ambos mandatarios, Macron dejó de lado las diferencias con Orbán y trató de recurrir a la diplomacia para buscar puntos de encuentro con su adversario político. Recordó que Francia y Hungría son «socios leales» en la Unión Europea: «Hay puntos de desacuerdo, pero somos socios leales y apoyamos a la Unión Europea».
Según el presidente francés, tres fueron los temas que discutió con Orbán: respeto a la libertad de los medios de comunicación, respeto a los derechos fundamentales y respeto al Estado de Derecho.
Más en concreto, Macron aseguró que iba a defender la necesidad de que el gobierno húngaro respete a las minorías, que evite cualquier forma de discriminación y que erradique la corrupción.
En la conversación también se trataron temas que trascienden los asuntos nacionales de Hungría y que afectan al conjunto de la Unión, como la soberanía energética de Europa, la digitalización o la defensa de las fronteras exteriores de la Unión Europea, según señaló la agencia EFE.
Son temas que el mismo Macron adelantó como prioridades en la rueda de prensa de presentación de su agenda en la presidencia rotatoria de la Unión Europea.
Viktor Orbán, preguntado sobre el lenguaje empleado por Macron para referirse a su relación con él, recurrió a la ironía y afirmó que «aceptamos que somos adversarios políticos, pero también socios europeos».
Además, insistió en que las diferencias políticas se plantean desde el respeto: «La relación de Hungría hacia el presidente Macron es la del respeto», aseguró.
«En tres puntos seguramente coincidiremos: amamos a nuestras patrias, queremos una Unión Europea más fuerte y opinamos que la Unión Europea necesita una autonomía estratégica», dijo el primer ministro húngaro según EFE.
Conversación tensa
Sin embargo, las buenas palabras y los puentes tendidos se acabaron tras la reunión. Por el tono de las palabras del presidente Macron, las diferencias pesaron más que los puntos de encuentro.
Macron criticó que el gobierno húngaro non ha dado pasos importantes en el respeto al Estado de Derecho que le exigen las instituciones de la Unión Europea. Para Macron, es muy posible que la Unión Europea, finalmente, retire los fondos del plan de recuperación por la pandemia a Hungría por su negativa a aceptar las condiciones de la Comisión Europea para garantizar el respeto al Estado de Derecho que, en opinión de la Comisión, está amenazado en Hungría.
«Hay muy pocos avances en estos temas. Creo que Hungría tiene una clara voluntad de no avanzar en estas cuestiones hasta las elecciones de abril. Esto significa que no habrá ningún pago hasta que haya un progreso concreto, de acuerdo con lo que hayamos decidido», lamentó Macron.
La valoración de Orbán sobre el encuentro tampoco se caracterizó por un balance positivo. Orbán definió el diálogo como «tenso» y denunció que la retirada de los fondos de recuperación a Hungría se debe a «razones políticas». Aseguró que Hungría es víctima de un «chantaje político».