Un caso de corrupción del hijo de Biden en Ucrania tensiona las relaciones entre EE.UU. y Rusia
Hunter Biden formó parte de una empresa gasista ucraniana salpicada por casos de corrupción durante el tiempo en que el actual presidente estadounidense era vicepresidente con Obama
Un antiguo informe del Senado sobre los vínculos del hijo de Joe Biden, con una empresa ucraniana de gas salpicada por casos de corrupción, estaría forzando al presidente de Estados Unidos a mostrar una actitud de firmeza frente a Rusia por la crisis ucraniana.
Según el experto en Seguridad Internacional consultado por El Debate, Manuel Sánchez Cánovas, «el hijo de Biden es su punto débil por sus relaciones y actividades en Ucrania». Debido a la existencia de ese informe, «Biden actúa de esta manera frente a Rusia para curarse en salud y como gesto de fuerza en Asia, lanzándole un mensaje implícito a China».
El informe se refiere a unos hechos sucedidos en 2014, justo después de las protestas que desalojaron del poder al presidente pro ruso, Viktor Yanukovych, y que suscitaron la intervención rusa en el país que se saldó con la anexión rusa de la península de Crimea y una larga guerra con la región independentista del Donbás.
Fue poco después del desalojo del poder de Yanukovych cuando el hijo del entonces vicepresidente Joe Biden, en la Administración de Barack Obama, Hunter Biden, se incorporó a la junta directiva de Burisma Holdings, empresa ucraniana de gas natural.
Según el informe de 87 páginas, elaborado por los Comités de Seguridad Nacional y Finanzas del Senado, «el papel de Hunter Biden en la junta directiva de Burisma impactó de forma negativa en los esfuerzos dedicados a luchar para impulsar medidas anticorrupción en Ucrania».
«El hijo del vicepresidente», concluyó el informe, «tenía relación directa con una empresa corrupta y sus propietarios». Se destacaba, además, que «los funcionarios del Departamento de Estado estaban al corriente de la asociación de Hunter Biden con Burisma».
Desafortunadamente, la presencia de Hunter Biden en la junta directiva de Burisma generó una situación incómoda a los funcionarios encargados de implementar la agenda anticorrupción en Ucrania «al mismo tiempo que el hijo del vicepresidente se sentaba en la junta directiva de una compañía ucraniana junto con su propietario corrupto».
«La presencia de Hunter Biden en la junta directiva de Burisma ensombrece el trabajo de quienes promueven medidas anticorrupción en Ucrania», se aseguraba en el informe.
Asimismo, «los registros adquiridos por los Comités también muestran que Hunter Biden y su familia estaban involucrados en una vasta red financiera que los conectaba con ciudadanos y gobierno extranjeros y gobiernos en todo el mundo».
Hunter Biden y su socio, Devon Archer, «formaron relaciones financieras significativas y consistentes con el oligarca corrupto Mykola Zlochevsky durante el tiempo que trabajaron para Burisma, y sus empresas ganaron millones de dólares de esa asociación mientras Joe Biden era vicepresidente y rostro público de la política ucraniana de la Administración Obama», se argumenta en el informe.