Nicaragua
La dictadura de Ortega arremete contra las universidades privadas de Nicaragua y estrecha lazos con las de Irán
Al menos tres universidades privadas han sido canceladas y otras dos han visto seriamente reducidas las subvenciones públicas que por ley se les asigna
La Asamblea Nacional de Nicaragua, de mayoría sandinista y parte de la dictadura nicaragüense encabezada por Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo aprobó el pasado 19 de enero la cancelación de tres asociaciones universitarias privadas a petición del Ministerio de Gobernación (MIGOB).
Durante el estallido social de 2018 que puso contra las cuerdas a Daniel Ortega, los estudiantes universitarios tanto de universidades públicas como privadas fueron el foco principal de las protestas y enfrentamientos con las fuerzas represoras del régimen Ortega- Murillo que dejó 355 muertos y más de 100.000 exiliados, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Las tres entidades civiles estaban asociadas a universidades privadas: la Asociación Pro-Universidad Agropecuaria de la Quinta Región, la Asociación Pro-Universidad de Jinotega y la Fundación Universidad de Mobile Latinoamericana Campus (Fumlac). En diciembre, el parlamento ya había cancelado la Universidad Hispanoamericana (UHISPAM), también privada.
El régimen alega que las juntas directivas de estas entidades que daban sustento jurídico a las universidades canceladas no rendían cuentas a las instituciones del gobierno. Otra forma de arremeter contra las universidades que aún escapan al régimen es el recorte arbitrario de fondos a centros de enseñanza superior.
Para 2022, por iniciativa del Consejo Nacional de Universidades (CNU), también controlado por la pareja presidencial, redujo al mínimo el presupuesto que el Estado otorgaba por mandato constitucional a algunas universidades como la jesuita Universidad Centroamericana (UCA) ubicada en Managua y la Universidad Católica del Trópico Seco (UCATSE) principal centro de estudios en temas agrícolas del norte del país.
«Roban el futuro de la juventud»
Daniel Ortega, de 76 años, asumió su cuarto mandato consecutivo tras ser reelegido fraudulentamente en las elecciones del 7 de noviembre con los principales opositores presos o en el exilio.
El jefe de la diplomacia estadounidense para las Américas, Brian Nichols denunció que «el régimen Ortega-Murillo le roba el futuro a la juventud nicaragüense al recortar los fondos y cerrar las mejores universidades, y al poner en listas negras a estudiantes activistas»
Al régimen solo le importa el control y poner a todo el país al servicio de una familia
Para el Grupo Interdisciplinario de Expertos Internacionales (GIEI) «el cierre de espacios políticos dentro de la universidad y dentro del movimiento estudiantil, en particular, fue uno de los detonantes de la masividad de las protestas que se iniciaron en abril y de la participación de estudiantes en ellas».
Las arbitrariedades del régimen contra los estudiantes universitarios, se han documentado en Libro Blanco: las evidencias de un Estado totalitario que registra veinte casos y testimonios de jóvenes universitarios que arbitrariamente fueron impedidos de coronar una carrera universitaria tras ser expulsados por participar desde las universidades en las protestas de 2018.
Estados Unidos y la Unión Europea, que consideran que los comicios no fueron democráticos, impusieron sanciones en los últimos años a familiares y allegados de Ortega y Murillo, así como a funcionarios y algunas entidades como la policía y la fiscalía por corrupción y violación de los derechos humanos.
Acercamiento a Irán
Irán es uno de los países que felicitó a Daniel Ortega, por su fraudulenta reelección. Irán envió a la ceremonia de investidura de Ortega, el pasado 10 de enero, a Mohsen Rezai, uno de los imputados por la Justicia argentina por el atentado de 1994 contra la mutua judía AMIA de Buenos Aires, cuya presencia en Managua fue condenada por 22 de los 34 países que son miembros activos de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Este 25 de enero, la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (Unan-Managua) y la Universidad Allameh Tabatabai (ATU) de Irán firmaron un acuerdo de cooperación, el cual propiciará el intercambio de experiencias académicas de estudiantes y docentes.
El memorando de entendimiento fue suscrito de manera virtual por la rectora de la UNAN-Managua y presidente del Consejo Nacional de Universidades, Ramona Rodríguez, así como por el vicerrector General y secretario general de esa casa de estudios, Luis Alfredo Lovato y Roberto Flores.
Por la parte iraní suscribieron el memorando el presidente de la ATU, Abdollah Motamedi; el vicepresidente de Investigación, Seyed Jalal Dehghani Firoozabadi, y el vicepresidente de Educación, Ali Adami.
Durante la ceremonia de firma se compartió la estructura académica y funcionamiento de ambas universidades, sus facultades y las carreras que ofrecen, y se destacó la voluntad de continuar fortaleciendo la cooperación a través del intercambio de estudiantes y docentes
En septiembre de 2019, la Asamblea Nacional, controlada por el régimen Ortega y Murillo, avaló un acuerdo de promoción y protección recíproca de inversiones entre los Gobiernos de Nicaragua y el de la República Islámica de Irán.