Reproches y acusaciones: Blinken y Lavrov no logran la ansiada desescalada en Ucrania
La llamada telefónica entre los responsables de la diplomacia de Estados Unidos y Rusia finaliza sin progresos
Rusia acusó a Estados Unidos de querer provocar una guerra en Ucrania y aseguró que los llamamientos de los últimos días a abandonar el país y las alertas de una invasión rusa en los próximos días forman parte de esa estrategia.
Durante la conversación telefónica que el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, mantuvo este sábado con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, el responsable de la diplomacia rusa aseguró que existe una «campaña de propaganda lanzada por Estados Unidos y sus aliados sobre una agresión rusa».
Según Lavrov, el objetivo de esa campaña de propaganda sería «provocar y envalentonar a las autoridades de Kiev» para que se embarquen en un nuevo conflicto en la región de Donbás, informó AFP.
El Donbás es un territorio industrial del este de Ucrania cuya población es ruso-parlante e independentista. El territorio se separó en 2014, durante la guerra civil con Kiev, gracias al apoyo de Rusia, que en ese conflicto también anexionó la península de Crimea.
Por su parte, Antony Blinken defendió que la vía diplomática para tratar de encontrar una salida que evite la guerra sigue «abierta», pero exigió a Rusia que sea ella la que de los primeros pasos hacia la «desescalada».
Asimismo, insistió en que una agresión rusa contra Ucrania «provocaría una respuesta transatlántica decidida, masiva y unida».
La ronda de llamadas de este sábado, en un intento diplomático desesperado para evitar la guerra en Europa, continuará en las próximas horas con una conversación entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente ruso Vladimir Putin.
Está prevista también una conversación entre Putin y el presidente de Francia, Emmanuel Macron.