Guerra en Ucrania
Putin alienta el terror nuclear: las tropas rusas conquistan la central más grande de Europa
Ucrania alerta de que si explotasen los 15 reactores nucleares del país sería «el fin» del Viejo Continente
Putin lo consiguió. Las tropas rusas, después de bombardear la mayor central nuclear de Europa, se hicieron con el control total. La planta de Zaporiyia, en Energodar, en el sureste de Ucrania, está en manos del enemigo. Pese al asalto, el personal que se ocupa del mantenimiento y operatividad de los reactores, se mantiene en sus puestos y, de momento, garantiza el correcto funcionamiento de la misma.
“Los reactores de la central permanecen intactos, existen daños en el edificio del compartimiento del reactor de la unidad de potencia No. 1, que no afectan a la seguridad del reactor. Los sistemas y elementos importantes para la seguridad de la central nuclear están funcionando. No se han registrado cambios en el estado de radiación en el momento actual". El fragmento corresponde al informe difundido por el ente regulador ucraniano.
Los ataques, desde entrada la madrugada, provocaron sendos incendios en un edificio de formación y en un laboratorio que pusieron en alerta al Organismo Internacional de la Energía Atómica (AIEA, por sus siglas en inglés). Su director, Rafael Mariano Grossi, pidió «frenar el uso de la fuerza» y advirtió del «grave peligro» que supondría un impacto directo contra los reactores.
Los servicios de emergencias ucranianos denunciaron que las tropas rusas impidieron el paso a los bomberos, si bien estos, finalmente, pudieron acceder a Zaporiyia minutos antes de las 5 de la madrugada y una hora más tarde las llamas fueron sofocadas.
El portavoz de la central nuclear, Andrii Tuz, aseguró que los servicios de emergencia no pudieron extinguir el incendio durante horas porque el fuego de artillería ruso estaba demasiado cerca. Si bien hasta el momento no se han detectado cambios en los niveles de radiación, el temor a que se hubiera producido un desastre estuvo presente.
«El combustible nuclear está dentro del reactor nuclear. Todavía no se ha descargado. Además, hay una piscina de recarga y almacenamiento de combustible nuclear en la sala central, que también contiene uranio y conjuntos de combustible nuclear», señaló el portavoz de la central, alertando del peligro de que se hubiera roto la cubierta sellada, recoge Efe.
Las autoridades ucranianas indicaron a la AIEA que afortunadamente el fuego en la planta nuclear de Zaporiyia no afectó al equipo esencial del complejo, según ha tuiteado este organismo dependiente de la ONU.
Invasión rusa de Ucrania
¿Con cuántas armas contarían Rusia y la OTAN si estallara una guerra nuclear?
La central retransmitió en directo a través de YouTube durante los enfrentamientos en el complejo nuclear situado junto al río Dniéper, que atraviesa de norte a sur casi todo el país. Los haces de luz provocados por los proyectiles del Ejército ruso fueron una constante y añarmaron a las autoridades ucranianas y a algunos de sus socios a nivel internacional.
Llamada a Biden
El presidente del país invadido por Rusia, Volodimir Zelenski, se puso en contacto con su homólogo estadounidense, Joe Biden, para mantenerle al tanto sobre un combate que podía haber conllevado consecuencias catastróficas.
En un comunicado, la Casa Blanca afirmó que el «presidente Biden se ha unido al presidente Zelenski para exigir a Rusia que cese sus actividades militares en el área».
Ningún otro país excepto Rusia ha disparado jamás contra centrales nucleares
Poco después, el propio Zelenski acusó en un vídeo oficial al presidente de Rusia, Vladimir Putin, de recurrir al «terror nuclear» y de querer «repetir» la catástrofe de Chernóbil, acaecida en 1986.
«Alertamos a todo el mundo sobre el hecho de que ningún otro país excepto Rusia ha disparado jamás contra centrales nucleares. Es la primera vez en nuestra historia, la primera vez en la historia de la humanidad. Este Estado terrorista recurre ahora al terror nuclear», defendió.
El mandatario ucraniano añadió que «Ucrania cuenta con 15 reactores nucleares. Si hay una explosión, es el fin de todo. El fin de Europa. Es la evacuación de Europa». Y reclamó una «acción europea inmediata» para frenar a las tropas rusas. «Hay que impedir que Europa muera de un desastre nuclear», ha añadido.
Al comienzo de los ataques rusos sobre la central, el ministro ucraniano de Asuntos Exteriores, Dmitro Kuleba, escribió un tuit en el que lamentaba que «el ejército ruso está disparando desde todos los lados contra la central nuclear de Zaporiyia» y advirtió de que si explotaba, el desastre sería «diez veces mayor que el de Chernóbil». «¡Los rusos deben cesar inmediatamente el fuego y permitir a los bomberos establecer una zona de seguridad!», ha clamado.
La resistencia de los empleados
El alcalde de Energodar había informado horas antes de que se estaban provocando enfrentamientos entre ambos ejércitos en los accesos a la central nuclear. «Se han producido feroces combates de más de una hora en los accesos a la central nuclear de Zaporiyia. Nuestras Guardias Nacionales mantienen la defensa», aseguró, antes de que las tropas rusas traspasasen las líneas ucranianas.
Ya el miércoles cientos de empleados de la central nuclear trataron de impedir a una columna del Ejército ruso que accediera a la planta con camiones cisterna y neumáticos para formar barricadas.
La central nuclear de Zaporiyia tiene seis reactores y suministra buena parte de la energía de Ucrania, por lo que su valor estratégico en la guerra es crucial. Otro de los objetivos de las bombas rusas durante la pasada madrugada fue la ciudad de Ojtirka, en la región de Sumi, a la que dejaron sin electricidad y calefacción en un momento en el que los termómetros marcaban 1º C. La estrategia de Putin también pasa por minar la moral de la población ucraniana a través del frío.