Día 36 de guerra en Ucrania
Ucrania triunfa con un tutorial de rendición para los soldados rusos
Deben gritar la palabra clave «millones», reciben una recompensa y una llamada de teléfono a su familia de premio
Esta guerra arroja sorpresas difícilmente imaginables antes. Vehículos blindados que terminan abandonados como si fueran chatarra, sistemas de comunicación rusos de principiantes y lo último, un tutorial ucraniano para que los soldados rusos se rindan como debe ser.
Día 29 de la guerra en Ucrania
Los insólitos problemas de comunicación de las tropas rusas en Ucrania
En una infografía publicada por el Colegio de Abogados de Ucrania se detallan los pasos y códigos a seguir para los desertores del otro bando. La última palabra clave que deben vociferar cuando crucen las líneas de fuego, con el fin de cambiarse de uniforme es: «Millones».
La ilustración está escrita en ruso para que no haya mal entendidos. Anna Ogrenchk, presidenta de la institución, ofreció todos los detalles a The Times. La secuencia es sencilla: arrojar las armas, levantar las armas, gritar «me rindo» y de inmediato pronunciar, «millones».
En la infografía se garantiza a los desertores, prisioneros de guerra o voluntarios, según se mire, la recompensa y una llamada de teléfono a su familia para ponerles al corriente de su nueva situación.
La literatura del texto se esfuerza en transmitir el mensaje de que «Ucrania no es el agresor y cumple las condiciones de la Convención de Ginebra sobre prisioneros de guerra».
La actitud que deben adoptar, según las instrucciones, es de sumisión total y deben acatar las órdenes que les den los oficiales ucranianos. El proceso de seducción del enemigo parece dar resultado a tenor de la legión formada.
Ucrania la ha bautizado «Libertad de Rusia» y no ha tardado mucho en distribuir imágenes en Telegram de sus «nuevos» uniformados adiestrándose con tanques y armamento propio.
«Perros encadenados a Putin»
De acuerdo a las fuentes ucranianas, los desertores rusos no se despojaban de sus brazaletes azules al entregarse y lo hacían con la fijación de combatir a las fuerzas chechenas, esos «perros encadenados a Putin», como los llaman.
Rusia tiene sobre el terreno una combinación de soldados profesionales, reclutas y mercenarios. Entre los primeros y los últimos han protagonizado escenas más que dramáticas.
Ucrania denuncian saqueos a viviendas, violaciones en serie, ejecuciones y torturas. Difícil discernir entre las acusaciones con base real y aquellas que no, los ucranianos recurren a grabaciones.
Las últimas dieron a conocer el diálogo entre un soldado ruso y su mujer. Él presumía de haber robado maquillaje para ella y la esposa le pedía que se hiciera con un ordenador y unas zapatillas. El comentario iba acompañado de una pregunta: «¿Qué ruso no robaría?»