Día 43 de guerra en Ucrania
Parte de guerra (10.30): los últimos hechos más importantes de la invasión rusa de Ucrania
Ante la amenaza de una concentración de ataques en el este del país, Ucrania ha puesto en marcha este jueves intensos esfuerzos para evacuar a los habitantes de dicha zona. Las autoridades creen que la retirada de tropas rusas de los alrededores de la capital ucraniana podría derivar en un reagrupamiento táctico para atacar el sureste del país. Y temen, al tiempo, que las imágenes de masacres descubiertas estos días puedan repetirse en la región separatista del Donbás.
Riesgo de una Tercera Guerra Mundial
El presidente del Estado Mayor Conjunto, el general Mark Milley, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, comparecieron ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes en su primer testimonio ante el Congreso desde la invasión rusa de Ucrania.
Milley dijo que la invasión de Ucrania por parte de Rusia es «la mayor amenaza para la paz y la seguridad de Europa y quizás del mundo» en sus 42 años de servicio en el Ejército estadounidense, y que el riesgo a un enfrentamiento entre grandes potenciales mundiales «está creciendo», pero agregó que era «alentador» ver al mundo unirse en torno a Ucrania.
El portavoz del Kremlin, en el punto de mira del líder checheno
Muchos en los pasillos del Kremlin se echan a temblar sólo de escuchar el nombre de Ramzan Kadyrov, señor de la guerra bajo el amparo de Vladimir Putin y líder absoluto de Chechenia. Todo aquel que sea objeto directo de sus críticas sabe que tiene motivos para preocuparse, y últimamente ha puesto en su punto de mira a demasiadas cabezas pensantes de Moscú. El último en ser blanco de sus agresivos comentarios ha sido el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Según The Times, Kadyrov, muy crítico con las negociaciones con Ucrania y ciego de ira por la retirada rusa de Kiev, acusó a Peskov de no ser un verdadero patriota: «Algo habrá que hacer al respecto», afirmó en unas declaraciones inquietantes.
Europa le da la patada a los diplomáticos rusos
El estallido de la guerra de Ucrania y el descubrimiento de la masacre de civiles en Bucha ha empujado a numerosos Gobiernos europeos a proceder a la expulsión de al menos 360 diplomáticos, oficiales y empleados de las embajadas rusas.
Países como Polonia, Suecia o Bélgica han justificado esta decisión bajo la acusación de espionaje al personal deportado, mientras que otros como Alemania o Dinamarca lo han hecho aludiendo a los ataques de la potencia euroasiática contra la población ucraniana.