54 DIAS DE GUERRA
Rusia trata de frenar el flujo de armas de la OTAN para hacerse con el Donbás
El ejército ruso bombardeó nuevamente Leópolis y afirma haber destruido un importante depósito de armas procedentes de la ayuda militar de Occidente
El ejército ruso afirmó este lunes que destruyó con «misiles de alta precisión», un importante almacén de armas «extrajeras» entregadas recientemente a Ucrania, cerca de Leópolis, en el oeste del país.
Los aviones rusos llevaron a cabo un bombardeo por la mañana contra un centro logístico de las fuerzas ucranianas, indicó el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov.
«El centro logístico e importantes lotes de armamento extranjero, entregados a Ucrania en los últimos seis días por Estados Unidos y países europeos, que se almacenaban allí, fueron destruidos» agregó Konashenkov en declaraciones recogidas por AFP.
El bombardeo en el extremo oeste de Ucrania, que ha dejado siete civiles muertos, se hace el mismo día que el Ejército ruso inició su «ofensiva final» en el Donbás tras retirarse hace un par de semanas del norte de Kiev.
Guerra Ucrania - Rusia
El vídeo que muestra el hundimiento del Moskva tras ser alcanzado por misiles ucranianos
Aunque el objetivo declarado de los bombardeos es un represalia por el hundimiento el pasado jueves del buque insignia de la Armada rusa «Moskvá» no se descarta que también persigan el objetivo estratégico de cortar o detener el flujo de armas occidentales para debilitar las defensas ucranianas en el Donbás.
La ofensiva para controlar el Donbás
«Durante la noche tuvo lugar una gran ofensiva. La situación ha cambiado radicalmente», aseguró Serhiy Gaidai, gobernador de la región de Lugansk, en Telegram.
Además, tropas rusas izaron la bandera tricolor en el edificio del Ayuntamiento del puerto de Berdiansk, un nuevo paso para el tendido de un corredor terrestre entre territorio de la Federación rusa y la anexionada península ucraniana de Crimea a lo largo de la costa del Mar de Azov.
La aviación rusa habría incrementado en un 50% el número de ataques
El reagrupamiento ruso, que incluye la llegada de unidades adicionales de refuerzo, está ya casi completado, según informó hoy el Ministerio de Defensa ucraniano. Rusia parece decidida a acelerar el paso en el este del país, donde la aviación enemiga habría incrementado en un 50% el número de ataques.
«Podemos informar de que la ofensiva ya ha comenzado», agregó Gaidai, quien agregó poco después que «los invasores tomaron Kreminna» una localidad de apenas 20.000 habitantes que permitirá a los soldados rusos atacar la retaguardia de la estratégica ciudad de Severodonetsk, bastión ucraniano en Lugansk.
Guerra Ucrania-Rusia
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El objetivo del Ejército ruso es tomar Severodonetsk y Lisichansk, donde habría unos 10.000 soldados ucranianos, tras lo que podrían avanzar hacia la región de Donetsk en dirección a Sloviansk y Kramatorsk.
Según la Administración militar, el enemigo también golpeó con bombardeos ciudades como Vugledar y Marinka, que se encuentran cerca de la línea de separación de fuerzas, que pasa por las afueras de la ciudad de Donetsk.
Conectar el Donbás con Crimea
Según el Ministerio de Defensa ucraniano, otro de los objetivos de la actual ofensiva en el este ucraniano sería garantizar la estabilidad del corredor terrestre entre el Donbás y Crimea.
De hecho, la televisión pública rusa mostró hoy imágenes de cómo soldados rusos izaban la bandera rusa en el Ayuntamiento de Berdiansk, de donde también retiraban de la fachada el escudo del Estado ucraniano.
«Los ocupantes intentan arrancarnos las regiones de Jersón y Zaporiyia a imagen y semejanza de las llamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk. Convierten a este territorio en zonas rublo y las subordinan a la máquina administrativa rusa», denunció el presidente Volodímir Zelenski en declaraciones recogidas por EFE.
Hay que resistir para que Rusia no logre desfigurar la vida de más ciudades en Ucrania
Zelenski denunció los secuestros de funcionarios locales, el chantaje a profesores, el robo del dinero destinado a las pensiones y el bloqueo de ayuda humanitaria.
«Saboteen las órdenes de los ocupantes. No cooperen con ellos. Protesten. Hay que resistir para que Rusia no logre desfigurar la vida de más ciudades en Ucrania, como han hecho en Donetsk y Lugansk», se dirigió a los residentes de las zonas ocupadas.