Fundado en 1910

El presidente ucraniano, Volodimir ZelenskiAFP

Guerra Ucrania-Rusia

Zelenski amenaza con abandonar las negociaciones de paz si Rusia celebra un referéndum en los territorios ocupados

Aún así, el presidente ucraniano insiste en reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, de quien dice no tener «miedo»

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha pedido nuevamente reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, para «poner fin a la guerra». Pero ha advertido de que si la población de Mariúpol es «aniquilada» o Rusia anuncia un referéndum en las «pseudo-repúblicas» –en referencia a las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk– así como en «los territorios ocupados temporalmente, Jersón y Zaporiyia», Ucrania «se retirará del proceso de negociación».

Zelenski teme que una vez que el Ejército ruso se haga con el control total de la ciudad portuaria de Mariúpol, a falta de doblegar al último reducto de resistencia de las tropas ucranianas asediadas en un complejo siderúrgico de la ciudad, Moscú anuncie la celebración de un referéndum en los territorios ocupados que legitime su anexión a Rusia. Aún así, el mandatario ucraniano insiste en reunirse con Putin, de quien dice no tener «miedo».

«No es que quiera [reunirme con él], sino que debo hacerlo para resolver este conflicto por la vía diplomática», ha explicado el presidente ucraniano, que ha reconocido que solo «quien empezó la guerra puede ponerle fin». Esta nueva petición de Zelenski se produce en medio del recrudecimiento de los ataques rusos sobre ciudades clave como Járkov, Odesa y por supuesto Mariúpol. A pesar de que Putin instara hace escasos días a su ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, a parar el asalto final a la acería de Mariúpol, el Ejército ruso continúa bombardeando el complejo.

Putin ordenó que, en vez de ejecutar un último ataque, las fuerzas rusas bloquearan la zona para «preservar la vida y salud» de los soldados rusos. Las autoridades rusas calculan que en las instalaciones de la acería Azovstal aun quedan más de 2.000 militares ucranianos. Kiev ha informado de que, junto a los combatientes, también hay alrededor de 1.000 civiles, entre ellos niños, refugiados en los sótanos de la planta siderúrgica. Ucrania y Rusia se culpan mutuamente de sabotear los corredores humanitarios en Mariúpol, mientras que las tropas rusas continúan con ataques aéreos para acabar con los últimos soldados ucranianos que resisten en esta ciudad.

Blinken visita Kiev

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el de Defensa, Lloyd Austin, tienen previsto viajar hoy hasta Kiev para reunirse con Zelenski. Se suman así a una larga lista de políticos que ya han visitado la capital ucraniana para mostrar su apoyo al país ante la invasión rusa. Zelenski ha adelantado que las conversaciones con los representantes del Gobierno estadounidense se centrarán en la entrega de más armas.

«Nos gustaría tener armas pesadas y potentes», ha pedido el presidente ucraniano, que también ha reclamado acelerar los tiempos de entrega. Además, Zelenski ha resaltado el papel que juega el país norteamericano en el conflicto: «Estados Unidos es el líder mundial, por lo que marca el ritmo y el tono de las negociaciones y la ayuda».

La Administración Biden ha sido uno de los mayores benefactores de Ucrania, y es que desde que se iniciara la invasión rusa del país, el pasado 24 de febrero, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha aprobado unos 3.400 millones de dólares en asistencia militar.