63 DIAS DE GUERRA
Polonia está tranquila: «No habrá escasez de gas, el suministro está asegurado»
La ministra de Clima y Medio Ambiente, Anna Moskwa minimiza el efecto del corte de gas de Rusia y el ministro de Energía búlgaro, Alexander Nikolova reconoce que tienen reservas para «seis meses»
La venganza no ha tardado en materializarse. A las 48 horas de conocerse que Polonia enviará una flota de tanques a Ucrania, Moscú decidió cortarle el suministro de gas y hacer lo mismo con Bulgaria.
La medida no parece preocupar mucho al gobierno de Varsovia, que ya tenía previsto un plan de contingencia ante una hipótesis que imaginaba real con inmediatez. «No habrá escasez de gas, los suministros están asegurados», enfatizó la ministra de Clima y Medio Ambiente, Anna Moskwa.
La excusa para justificar este castigo a Polonia del Kremlin es la negativa de Varsovia a pagar en rublos el gas importado, como exige Vladimir Putin.
La ministra Moskwa defendió la soberanía de su país y minimizó los efectos de la medida. Para empezar, advirtió: «no hay decretos de (Vladímir) Putin que estén en vigor en Polonia», en referencia a la exigencia de Moscú a los contratistas de Gazprom «hostiles a la Federación Rusa» de que se cobre en rublos.
Moskwa explicó que «las existencias de gas almacenado en Polonia rondan el 80 por ciento, que es mucho». Por lo tanto, celebró, «por el momento, no hay necesidad de buscar nuevos suministros: tenemos almacenado suficiente GNL (gas licuado)».
Ante cualquier eventualidad el Gobierno podría recurrir, «al interconector checo y si fuera necesario, al lituano».
PGNiG, la empresa estatal de gas polaco, informó del corte de gas: «El 26 de abril de 2022, Gazprom comunicó a PGNiG su intención de suspender completamente los suministros en el marco del contrato Yamal (...) el 27 de abril».
Polonia lo considera un incumplimiento de contrato pero puntualizó, como explicó hoy la ministra, que estaba preparada para «obtener el gas que falte de otras fuentes».
No habrá escasez de gas en los hogares polacos
En situación similar se encontró Bulgaria. El Ministerio de Economía confirmó que Rusia adoptará la misma medida con su país hopy: «Hoy, Bulgargas EAD (la empresa local) recibió la notificación de que los suministros de Gazprom Export serán suspendidos a partir del 27 de abril de 2022».
Si bien su situación no es igual a la de Polonia, Bulgaria, firme en su decisión de no pagar en rublos, avanza en la exploración de un gasoducto que lo conecte con Grecia.
Bulgaria tiene reservas para 6 meses
El ministro de Energía búlgaro, Alexander Nikolov, precisó en rueda de prensa en Sofía -informa Efe- que el principal almacén para gas natural del país, situado al norte de Bulgaria, está al 18 % de sus capacidades en estos momentos.
Esto significa que tiene autonomía para seis meses. «Evidentemente -reflexionó Nikolov- en este momento el gas natural se usa más como un arma política y económica» por la invasión de Rusia a Ucrania.
El gobierno polaco insistió ayer y su ministra lo reiteró esta mañana que está preparado para afrontar cualquier interrupción de suministro desde Rusia. «No habrá escasez de gas en los hogares polacos», insistió Anna Moskwa para tranquilizar a la población.
«Desde el primer día de la guerra, declaramos que estamos preparados para la plena independencia de las materias primas rusas», añadió.
«Polonia tiene las reservas de gas y las fuentes de suministro necesarias para proteger nuestra seguridad. Desde hace años nos independizamos con éxito de Rusia», recordó.
El primer ministro Mateusz Morawiecki dijo por su parte que las instalaciones de almacenamiento de gas estaban llenas en un 76% y que Polonia estaba preparado para «obtener gas de todas las partes posibles».
Gazprom confirmó la interrupción del suministro y advirtió que «Polonia debe pagar por los suministros de gas según el nuevo procedimiento de pago». es decir, en rublos.
Después de que los países occidentales impusieran una serie de sanciones a Rusia por la invasión de Ucrania, el Kremlin advirtió de que se les iba a cortar el suministro de gas a menos que paguen en rublos.
Polonia importa gas licuado a través de una terminal en la costa del mar Báltico, y también espera recibir suministros de Noruega a través del proyecto Baltic Pipe, cuya finalización está prevista para este año.
La conexión de 900 kilómetros debería cubrir el 50% del consumo polaco.