Hispanoamérica
La dictadura de Nicaragua condena por «traición a la patria» al exdiplomático y sacerdote Edgar Parrales
El exembajador ante la OEA, apresado y condenado con 79 años de edad, es uno de los más de 170 presos políticos del régimen de Daniel Ortega
La dictadura de Daniel Ortega en Nicaragua no tiene compasión con nadie, ni tan siquiera por aquellos presos políticos que por su edad y estado de salud deberían ser liberados. Este es el caso de Edgard Parrales, el exembajador y sacerdote nicaragüense que cometió el 'delito' de criticar a Ortega y su régimen.
Parrales, fue declarado el martes culpable de «menoscabo a la integridad nacional», un delito recientemente creado por la dictadura nicaragüense para perseguir a los opositores que piden sanciones internaciones contra la cúpula sandinista que gobierna con mano de hierro el país centroamericano desde 2007.
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El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), una oenegé que sigue los procesos judiciales contra opositores, informó que Parrales, de 79 años, fue declarado culpable en un juicio a puertas cerradas en una prisión policial de Managua conocida como El Chipote.
Una farsa judicial
Parrales, que se encuentra privado de la libertad desde el 22 de noviembre de 2021 y en detención domiciliar desde el 26 de febrero pasado, fue declarado culpable por la jueza Nadia Camila Tardencilla Rodríguez, titular del Juzgado Segundo de Distrito Penal de Managua.
Tardencilla es hija del exguerrillero, exdiputado y último embajador de la dictadura de Ortega ante la OEA, Orlando Tardencilla.
«En esta farsa judicial se volvió a repetir el trato cruel contra los presos políticos que se encuentran con arresto domiciliar. Al Dr. Edgard Parrales lo trasladaron al Chipote (una prisión preventiva de la Dirección de Auxilio Judicial), lo metieron a una celda, le pusieron uniforme de preso y lo llevaron a la sala de juicio con bridas», denunció la organización de defensa de derechos humanos.
Soy inocente, me avala una historia de vida y de compromiso con Nicaragua
La Fiscalía, que pidió ocho años de cárcel para Parrales y le acusó de difundir noticias falsas tras ofrecer una entrevista a un canal de televisión local, en la que analizó la decisión de Nicaragua de denunciar la Carta de la OEA, el documento fundacional de 1948, y con la cual oficializó su salida del organismo continental.
Delicado estado de salud
El opositor estuvo detenido desde noviembre hasta marzo en las celdas de prisión preventiva de El Chipote, pero luego quedó con arresto domiciliario por problemas de salud, régimen bajo el que se mantendrá y que posiblemente cumpla la condena que será leída el próximo 5 de mayo.
Parrales, quien tiene problemas de salud crónicos por la falta de intestino grueso y una hernia en el estómago, fue enviado a régimen de arresto domiciliario tras la muerte del exguerrillero histórico sandinista Hugo Torres, bajo custodia policial, por causas aún desconocidas.
Exaliado de Ortega y sacerdote suspendido por 30 años
También es el único religioso que continúa con vida de los cuatro sacerdotes que el papa Juan Pablo II suspendió «a divinis» en 1984, junto con el poeta trapense Ernesto Cardenal, el educador Fernando Cardenal y el excanciller sandinista Miguel D'Escoto, por adscribirse a la Teología de la Liberación, suspensión que fue levantada en 2014 por el Papa Francisco.