Rusia amenaza a Finlandia con «represalias de carácter militar» si se une a la OTAN

Consciente de que la invasión a Ucrania no sólo no ha supuesto una retirada de la OTAN del este de Europa, sino que incluso la ha fortalecido, Rusia amenazó a Finlandia con «represalias de carácter militar» si, finalmente, ingresa en la OTAN.

Finlandia iniciará próximamente el proceso de solicitud de ingreso en la OTAN, un ingreso que, cuando sea realidad, supondrá que la Alianza Atlántica establecerá una larguísima e inédita frontera con Rusia de 1.340 kilómetros de extensión.

En un comunicado difundido por el ministerio ruso de Exteriores, que dirige el polémico Sergei Lavrov, recogido por Europa Press, el Kremlin afirma que la adhesión de Finlandia a la OTAN «causará graves daños a las relaciones bilaterales».

Se señala también que Rusia «se verá obligada a adoptar represalias para detener las amenazas de seguridad contra su territorio».

«Helsinki debe ser consciente de la responsabilidad y de las consecuencias que implican tal paso», se señala en tono amenazante.

El ministerio de Lavrov lamentó que «ni las garantías de Rusia sobre la ausencia de intenciones hostiles hacia Finlandia, ni la larga historia de buena vecindad y cooperación mutuamente beneficiosa entre nuestros países, ha convencido a Helsinki de las ventajas de mantener una política de no alineación militar».

En ese sentido, se subraya que «la historia juzgará la decisión de Finlandia de convertir su territorio en una frontera de confrontación militar con Rusia mientras pierde independencia para tomar sus propias decisiones».

Las declaraciones de Lavrov suponen un aumento de la dureza de la reacción del Kremlin a la probable incorporación de Finlandia a los aliados después de una primera declaración del portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, que dejaba entrever una posición débil de Rusia.

«La ampliación de la OTAN y el acercamiento de la Alianza a nuestras fronteras no convierten el mundo ni nuestro continente en más estables y seguros», afirmó el portavoz del Kremlin en un encuentro con los medios de comunicación.

Preguntado sobre si Rusia considera que el ingreso de Finlandia en la OTAN supone una amenaza, Peskov señaló que «sin duda».

Sin embargo, en Finlandia tampoco tienen duda sobre el paso a dar. El apoyo a la OTAN en la población finlandesa se ha disparado, y existe un consenso político a favor del ingreso del país en la Alianza defensiva como medida de garantizar su seguridad frente al expansionismo ruso.

En el gobierno finlandés, convencidos de que no hay ninguna medida diplomática capaz de frenar a Putin, se han dejado de medias tintas: «Tú has provocado esto», le echó en cara al presidente ruso el presidente finlandés, Sauli Niinisto.

La posible ampliación de la OTAN con la incorporación de Suecia y Finlandia es el efecto colateral inesperado de la invasión de Rusia a Ucrania.

Vladimir Putin, y los estrategas del Kremlin, se afanan en justificar, precisamente, la invasión a Ucrania como un modo de alejar a la OTAN de las fronteras rusas.

Sin embargo, el efecto es el contrario de modo que la guerra en Ucrania se revelaría como un inmenso error de Putin que habría favorecido un resurgir de la Alianza Atlántica que se fortalece y crece como reacción a la agresión militar de Rusia.