Ecuador
Los indígenas y el presidente Lasso buscan una solución tras 5 días de bloqueos y protestas
El presidente de Ecuador declaró el estado de excepción en tres regiones y se reunió también con alcaldes y gobernadores provinciales
Las protestas en Ecuador se «radicalizarán» tras la detención de líder indígena liberado a las 24 horas
Guillermo Lasso tiende puentes y abre las puertas del Palacio de Carondelet (sede del Ejecutivo) a los movimientos indígenas.
El sucesor de Lenin Moreno, intenta desactivar las movilizaciones de unos grupos con capacidad demostrada para tumbar gobiernos. Lo han hecho en anteriores ocasiones y Lasso no está dispuesto a ser protagonista de otra repetición de la historia.
En torno a un centenar de indígenas (del sector dialogante) acudió ayer a la sede de gobierno en son de paz y como gesto de buena voluntad, para tratar de alcanzar un acuerdo que permita poner fin a cinco días de bloqueos y manifestaciones.
Su principal demanda es una rebaja del precio -disparado- de los combustibles. Con la economía dolarizada el litro de gasolina es de 2,55 dólares y el de diesel de 1,90. Campesinos, estudiantes y las fuerzas vivas indígenas se echan a la calle para protestar ante unos precios inasumibles para sus bolsillos.
La agencia AFP informa de enormes humaredas negras por neumáticos quemados durante estos días. La «Ruta Viva», una de las vías que conecta el aeropuerto internacional de Quito está semi oculta, de forma intermitente, bajo esa nube oscura pese a que los vuelos no se han suspendido,
Lasso, un exbanquero liberal que logró alcanzar la Presidencia al tercer intento, recibió ayer a un centenar de indígenas que le reclamaban abordar el problema en una mesa.
La predisposición de este grupo fue positiva. «Sin diálogo no hay camino. Cuente con total respaldo desde las organizaciones que queremos el cambio constructivo», declaró Orlando Tipán, titular de la organización Unoric (Unión de Organizaciones Indígenas de Cotopaxi), luego del encuentro con el mandatario en el Palacio de Carondelet.
«No queremos derramamiento de sangre, más vandalismo, más violencia
El fantasma de las revueltas del 2019 que pusieron en jaque a Lenin Moreno, pareció quedar desterrado, al menos, con la actitud de este colectivo. «No queremos derramamiento de sangre, más vandalismo, más violencia. Ecuador es un país de paz», manifestó el secretario de la misma agrupación, César Pérez.
En los últimos días se han producido enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes. El Gobierno de Lasso tiene presente la experiencia de la anterior Administración y actuó con reflejos al declarar el Estado de Excepción en varias zonas y no ahorrar en gases lacrimógenos.
A diferencia de UNORIC, la organización más poderosa, la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (CONAI) se mostró más beligerante y advirtió que protestará en las calles hasta que el gobierno cumpla con una lista de 10 demandas.
Entre estas, la regulación del precio de productos agrícolas y la renegociación de deudas de cuatro millones de familias con la banca.
La CONAI, el verdugo de presidentes
La Conaie fue determinante en las revueltas que derrocaron a tres presidentes entre 1997 y 2005. Leonidas Iza, su lider, manifestó que por su parte, «no hay ningún diálogo» con el Ejecutivo. Por el contrario, denunció a Lasso y a varios de sus ministros después de que estuviera detenido por espàcio de 24 horas por bloquear el acceso a Quito en una de las arterias principales.
La CONAI es el verdugo histórico de los gobiernos. En 2019 fue la organización que encabezó violentas protestas y estuvo a un paso de derrocar a Lenin Moreno. El balance de aquellas revueltas fue de 11 muertos y más de 1.000 heridos.
Aquellas movilizaciones se consideran el primer chispazo del incendió que recorrería la cordillera andina y encontraría en Chile, con Sebastián Piñera en el Palacio de la Moneda, el mejor caldo de cultivo para el estallido social de octubre.
Estos bloqueos han perjudicado la actividad de sectores de exportación fundamentales para Ecuador. El de las flores es uno de ellos. Los principales productores de venta del país, -informa Efe- denunciaron en Twitter que a raíz del corte de rutas, «la producción se está perdiendo, las flores se pudren».
El ministerio de Producción estima que las protestas han dejado ya pérdidas por 50 millones de dólares.
La gasolina a 2,55 dólares
La principal reclamación de los manifestantes es la rebaja de los combustibles: entre mayo de 2020 y octubre de 2021, el diésel subió un 90% (a 1,90 dólares el galón) y la gasolina corriente en 46% (a 2,55). El gobierno rechaza aplicar una rebaja de 1,50 y 2,10 dólares, respectivamente.
Lasso volvió a instar ayer a solucionar el conflicto mediante el diálogo y que abandonen las calles. La iglesia, la ONU y universidades se han ofrecidos como mediadores.
«Esa es la manera, que dentro del Estado de Derecho, del respeto a la ley y a la Constitución se pueden resolver los problemas que se han acumulado a lo largo de décadas en el Ecuador», manifestó Lasso al recibir a la Unoric.
«Lo que hay que hacer es dialogar (...) pero no puede ser que la violencia sea el camino para llegar a la resolución de los problemas», insistió el presidente.