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El primer ministro de Italia, Mario DraghiEfe

Crisis Italia

Italia abre un paréntesis hasta el miércoles para decidir su futuro y el de Mario Draghi

Salvini y Meloni, favorecida por las encuestas, presionan para anticipar elecciones previstas para la primavera

Mario Draghi, hastiado de la situación, podía pretender dar el portazo y marcharse, pero esa posibilidad la tiene cerrada hasta el próximo miércoles. Su próximo «dead line» en el Gobierno será, definitivamente, ese día.

El primer ministro de Italia tendrá la prueba del algodón, o de la mano alzada, para saber con quién cuenta y con quién, no.

El paréntesis que se abre permite avanzar en gestiones y negociaciones para evitar otro nuevo descarrilamiento de la política italiana.

La falta de apoyo en el Senado de uno de los socios más importantes de su coalición, el Movimiento Cinco Estrellas (M5S) ha sido el detonante del estallido de Draghi y de esta nueva e inoportuna sacudida a la frágil estabilidad de Italia.

La opción Draghi es la favorita de la coalición «unidad nacional», pero la carrera de obstáculos a la que le somete la Liga de Matteo Salvini (a la derecha de la derecha) le resulta algo más que fatigante, le complica la gobernabilidad.

El progresista Partido Demócrata (PD), la centrista Italia Viva (IV) y la conservadora Forza Italia (FI) disponen de los próximos cinco días para convencer a Draghi de que se quede.

El todavía primer ministro no se mueve de su posición inicial cuando proclamo que únicamente ocuparía el cargo si tenía la aceptación de todos los socios de la alianza.

Al borde del abismo

La montaña rusa en que la viaja la política italiana acaba de someter al país a un nuevo precipicio en el peor momento. Se necesita un rumbo firme para gestionar las consecuencias de la invasión de Ucrania y la última ola de la covid 19.

Italia, como el resto de Europa, atraviesa una crisis energética importante, la inflación alcanzó el 8 por ciento en junio y se encuentra en pleno proceso de reformas para poder recibir los fondos Next Generation de la UE.

El cimbronazo de Draghi parece haber hecho reflexionar al Movimiento 5 Estrellas. Su portavoz en el Senado, Maria Domenica Castellone, -informa Efe- ahora «está dispuesta a dar la confianza a Draghi».

El M5S precipitó la decisión de Draghi al anunciar que su formación no iba a votar el decreto del gobierno destinado a amortiguar los efectos del alza del IPC en Italia.

Salvini y Giorgia Meloni, lideresa de los Hermanos de Italia, apuestan por unas elecciones anticipadas, pese a que en primavera esta prevista su convocatoria oficial.

Meloni es la esperanza blanca de la derecha y la candidata, según los sondeos, con más posibilidades de ganar en las urnas si éstas se abrieran mañana.